Un hispano muere tras recibir 16 disparos de un policía en EEUU

El tiroteo ocurrió el pasado 21 de febrero en una gasolinera. Los agentes de seguridad habían acudido tras recibir una llamada porque el hispano, Nicolás Sánchez, de 38 años, estaba vagando en el lugar y «actuando de manera sospechosa», informan medios locales.

Los vídeos, grabados por las cámaras que llevaban los policías, en un principio muestran un intercambio de palabras entre los oficiales y el sospechoso, quien este sorprendido rechaza acatar las órdenes argumentando que no ha hecho nada.

Pero cuando uno de los agentes intenta cogerlo, Sánchez sale corriendo, pero los policías inmediatamente lo alcanzan y es cuando ocurre todo, en cuestión de segundos y no se puede ver con claridad qué es lo que ocurrió realmente.

La prensa local afirma que se realizaron un total de 16 disparos en seis segundos. Por su parte, los abogados del Departamento de Policía de Roy aseguran que los agentes «actuaron apropiadamente» porque Sánchez tenía una pistola.

Además afirma que en el forcejeo el policía logró arrebatar el arma de Sánchez y abrió fuego con esa pistola en «defensa propia».

De momento, los agentes involucrados en este tiroteo se encuentran con «licencia administrativa» hasta que finalice la investigación que ha iniciado la Fiscalía del condado de Weber (Utah). Además se informa que Sánchez tenía una larga historia criminal y que había acabado de salir en libertad condicional.