El crimen se produjo en agosto de 2015, después de que el curandero, que responde al nombre de Bhekukufa Lindeni Gumede y tiene 65 años, contratara a sus tres cómplices para que asesinaran a una mujer albina, para elaborar, con partes de su cuerpo, un ungüento que le traería riqueza.
La víctima, Thandazile Mpunzi, de 20 años y que había sido novia de uno de sus verdugos, fue estrangulada y apuñalada por los tres cómplices de Gumede, junto al que desmembraron el cadáver al día siguiente en la misma localidad de la provincia oriental de KwaZulu-Natal en la que asesinaron a la joven.
Los tres ejecutores fueron detenidos meses antes que el curandero, y cumplen penas de entre 18 y 20 años de cárcel.
La creencia en las propiedades sobrenaturales de sus huesos y otras partes del cuerpo es una amenaza para las personas con albinismo en algunos países africanos, en los que son asesinados para elaborar ungüentos o hacer rituales y sus tumbas profanadas para robar sus restos.
Uno de los países más afectados por este fenómeno es Malaui, donde el Gobierno y organizaciones cívicas han puesto en marcha campañas informativas para acabar con una superstición que se ha convertido en negocio para algunos y en una tragedia para los albinos.
4 comentarios
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Radical-bot, quise decir. O lo que es lo mismo, esos supuestos progres que repiten como robots consignas supuestamente progresistas.
Es Apaña, los buenistas y los racical-bots defenderían a ese fantoche diciendo que es su cultura y hay que respetarla
que raro que no viniera a España a hacer estas cosas. aquí libertad sin fianza y te puedes ir a ginebra, huy ,que no es este¡¡¡¡¡
Si llega a hacer esto en España seguramente le hubiera caido una multa de 50 euros y 3 meses de carcel,y al salir trabajo y un piso