Los hechos se desencadenaron minutos antes de las 15.30 horas del martes cuando el hombre, hacha en mano, empezó a amenazar de muerte a varios vecinos de un inmueble ubicado en la avenida Sant Jordi.
Según informó ayer el Cuerpo Nacional de Policía en un comunicado, el hombre intentó agredir a varios vecinos y había causado graves daños en un inmueble de la avenida Sant Jordi.
Las mismas fuentes explicaron que la celeridad de la actuación policial «permitió evitar una tragedia, ya que el agresor había intentado lesionar a dos vecinos atacándoles con el hacha».
Intervención policial
Testigos de los hechos alertaron telefónicamente a la Policía Nacional y hasta el lugar se desplazó una patrulla de policías.
Al llegar, los efectivos policiales desplazados comprobaron que el grado de amenazas, agresividad y peligrosidad de la situación llegó a tal punto que los agentes que intervinieron se vieron obligados a desenfundar sus armas reglamentarias y conminar verbalmente al agresor para que depusiera su violenta actitud.
Tras esos momentos de tensión, los agentes lograron reducir y detener al protagonista de este violento episodio.
El detenido, de 44 años, fue trasladado a la Comisaría de Policía Nacional de Vila y, posteriormente, fue dirigido a los juzgados de Isidor Macabich, donde prestó declaración ante el juzgado de guardia.
Tras su comparecencia, el juez ordenó el ingreso en prisión provisional del hombre que fue acusado de varios delitos. El detenido fue trasladado al centro penitenciario de Eivissa.
Los agentes de la Policía Nacional tomaron declaración a varios testigos presenciales de los hechos. Uno de ellos apuntó que la violencia del hombre fue in crescendo e incluso llegó a abalanzarse sobre una de las víctimas que estaba caída en el suelo y a la que trató de asestarle un hachazo en la cabeza.
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