El colombiano José Mario A.A., de 5 1 años y más conocido como 'Chepe', tendrá que sentarse en el banquillo de la Audiencia Provincial como supuesto líder de un grupo de traficantes de cocaína al por menor que se había asentado en Eivissa y que fue desmantelado por la policía en febrero.

Dos de los acusados son ibicencos y los otros cinco sudamericanos. La red llevaba sólo tres meses operando en Vila y cayó en la denominada operación 'Cata'. El presunto cabecilla del grupo se enfrenta a siete años de cárcel y el resto a penas de cinco años.

Las investigaciones llevadas a cabo por el Grupo de Estupefacientes de Comisaría determinaron que 'Chepe' y su mujer, la también colombiana Alba Ruth G.M., de 39 años, se dedicaron desde diciembre de 2009 a febrero de 2010 a montar, desde su domicilio en la calle Madrid de Vila, una distribuidora de cocaína.

Trama

Su 'negocio' fue desmantelado después de que la policía hubiera buceado en su trama y hubiera descubierto que el matrimonio se había rodeado de un numeroso grupo de personas, dos de ellas ibicencos (Juan T.T., de 49 años, y Juan José S.B., de 25), que supuestamente participaban del consumo y la distribución de la droga a terceros. El piso de la calle Madrid era también asiduamente visitado por otros consumidores ajenos a las tareas de distribución a las que se prestaban presuntamente los otros arrestados.

La operación 'Cata' culminó el 25 de febrero cuando los agentes del Grupo de Estupefacientes entraron en el piso de la calle Madrid y en las horas siguientes detuvieron tanto al matrimonio como a los otros cinco sospechosos, otros dos colombianos, los dos ibicencos imputados y un ecuatoriano.

Los agentes intervinieron cuando el grupo guardaba aún cien gramos de cocaína en roca de gran pureza y se preparaba para cortarla y distribuirla entre los clientes que iban captando.

Junto al estupefacientes, se incautaron de 5.000 euros en efectivo, en billetes de 20 euros que había ocultos en un armario, y numerosos útiles para confeccionar las papelinas.