El juez de guardia, en este caso el titular del Juzgado de Instrucción 1, Juan Carlos Torres, ordenó ayer por la mañana el ingreso en prisión con carácter provisional del italiano A.F., acusado de la comisión de dos robos con fuerza. El caso tendrá que ser estudiado por el Juzgado de Instrucción número 4. Fuentes judiciales señalaron que, en un primer robo, el 11 de noviembre, el italiano rompió una puerta que da a la terraza de una vivienda del número 10 de la calle Travesía de Sa Penya, y se llevó los componentes de una cama, es decir, somier, colchón y la ropa correspondiente. Al día siguiente, entró por el mismo lugar y se llevó, siempre según las fuentes judiciales, una lavadora, un frigorífico y una botella de butano. Los agentes del Cuerpo Nacional de Policía dieron con el supuesto ladrón porque que éste, presuntamente, dejó huellas que lo delataron.

J.M.C.G., el hombre de 43 años de edad que anteanoche fue sorprendido por un ciudadano robando en la sede de la Delegación del Educación, se conformó con un año de prisión. Aunque J.M.C.G. fue condenado en 2003 a ocho meses de prisión por otro robo con fuerza, estos antecedentes ya no son computables, por lo que no tendrá que ingresar en prisión. Los hechos ocurrieron a las cuatro de la mañana. Pudo ser detenido gracias a la intervención de un ciudadano que le sorprendió cuando salía por la puerta de la sede de la Delegación del Educación con un ordenador y un proyector. Previamente había desvalijado la máquina de café.