«Volvió a ocurrir cuando llegué de recoger espárragos. Por tercer vez este mes me atacó». Éste fue el testimonio que prestó ayer en el juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa una vecina de Santa Eulària que terminó denunciando a su hermano después de que dicha persona supuestamente le agarrara por el cuello cuando la mujer le recriminó la desaparición de un objeto tras encontrarse su habitación totalmente desordenada.

El sospechoso, que se enfrenta a una condena de seis meses de prisión y a dos años de no comunicación y acercamiento con su hermana, afirmó en el juicio que él fue la víctima y que, en ningún caso sujetó a la mujer sino otros familiares que comparten con ellos la vivienda.

La afectada, sin embargo, relató que existían muy malas relaciones con su hermano y que todos ellos se había visto abocados a tener que residir en el mismo inmueble, propiedad de su padre. La Policía Local de Santa Eulària sorprendió al acusado cuando llamaba «puta y guarra» a la víctima.