El primero apareció el miércoles en s'Arenal y ayer fue en es Caló des Moro. El primero era joven y medía 110 centímetros, y el segundo, una cría de unos 90 centímetros. Ambos eran delfines listados (Stenella coeruleoalba) y se cree que llegaron a la zona de la bahía de Portmany procedentes de la misma dirección, noroeste.
Fuentes del Ayuntamiento de Sant Antoni dijeron ayer que con el fin de saber si se trata de una mera casualidad o si existe algún problema medioambiental que esté afectando a los delfines solicitarán a la Conselleria de Medi Ambient los resultados de los análisis que, supuestamente, se va a realizar a los cetáceos.
Desde Medi Ambient aseguraron ayer que se han extraído muestras de tejido de ambos animales, en concreto tejido dental y un centímetro cuadrado de grasa y piel de la aleta dorsal.
Estas muestras, tomadas por técnicos del Ibanat, se congelarán y serán enviadas a los laboratorios mallorquines de Marinelad, según Medi Ambient. Desde las oficinas de esta empresa en Palma mostraron su preocupación tras la aparición del segundo delfín y dijeron que en Marineland se almacenan las muestras con fines estadísticos pero que ellos no realizan análisis toxicológicos.
Hidrocarburo
El primero de los delfines, el del miércoles, estaba sucio de algún tipo de hidrocarburo. En la cría que llegó ayer por la mañana a la playa de es Caló des Moro no se apreciaban manchas de este tipo.
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