El Ayuntamiento de Vila ha habilitado 20 vacantes para que las personas condenadas a trabajos en beneficio de la comunidad (TBC) cumplan sus penas, informaron ayer fuentes municipales. Por primera vez en Eivissa, dos personas comenzaron el pasado lunes a realizar este tipo de trabajos en el Ayuntamiento de Vila, donde cumplieron funciones de «mantenimiento de instalaciones municipales».
Las 20 plazas habilitadas por el Ayuntamiento de Vila son para realizar este mismo tipo de tareas, señalaron fuentes municipales. También desde el Ayuntamiento dijeron que no se va a informar exactamente acerca de qué tipo de tareas realizan los condenados ni el delito por el que fueron condenados en su día, con el fin de proteger su identidad.
Los delitos
En Eivissa y Formentera existen decenas de condenas a TBC pendientes de cumplir. En marzo pasado las oficinas de Mallorca de la Fundación de Ayuda a la Reinserción, encargada de gestionar este tipo de condenas penales, se acumulaban 58 sentencias a trabajos comunitarios, la mayor parte de éstas por delitos de violencia machista, seguidas por delitos contra la seguridad vial.
No obstante, a lo largo de los años se ha ido acumulando un número indeterminado de sentencias a TBC que hasta ahora no se han podido cumplir. Desde que comenzó 2008 los jueces se ven en la obligación de condenar a TBC en los delitos contra la seguridad vial, mientras que en los casos de violencia doméstica sigue siendo una alternativa. En cualquiera de los casos, los TBC deben ser aceptados por el condenado, que normalmente suele preferir este tipo de castigo antes que ingresar en prisión o sumar antecedentes penales, en el caso de que no los tuviera con anterioridad.
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