Un momento de la actuación de los efectivos.

R.S.

Unas 180 personas participaron en el gran simulacro de incendio que se realizó ayer por la mañana en la zona de Cala Carbó, en el municipio de Sant Josep. Según la consellera balear de Interior, María Àngeles Leciñena, se trató del «simulacro de mayores dimensiones realizado en la comunidad autónoma» y tras su consecución se demostró, también en palabras suyas, que «los ciudadanos pueden estar tranquilos porque contamos con medios suficientes para hacer frente a incendios forestales». En este gran ensayo participaron soldados de la UME, bomberos del Consell d'Eivissa, personal del Ibanat, de la Guardia Civil, sobre todo del Seprona, que son los responsables de investigar las causas de los incendios, voluntarios de Protección Civil y agentes de la Policía Local de Sant Josep, entre otros.

Lejos de las palabras de Leciñena se ubican las de un bombero del Consell d'Eivissa que participó en el simulacro: «Que se dejen de paripés y digan lo que pasa. Nosotros no tenemos más que un camión para incendios forestales y tiene varias décadas de antigüedad». Al respecto, Leciñena recordó que este asunto no es de su competencia, sino del Consell d'Eivissa, pero añadió: «Nosotros tenemos que mejorar el equipamiento constantemente».

Leciñena añadió que ahora es el momento de analizar los tiempos marcados durante el simulacro y otros factores con el fin de tomar las decisiones pertinentes sobre el plan de emergencias relativo a incendios forestales.