Una camión derramó ayer sobre la una y cuarto de la tarde más de 200 litros de gasoil sobre la Avenida Bartolomé Roselló, a la altura de Empresas Matutes, lo que obligó a la Policía Local de Eivissa a cerrar al tráfico esta importante arteria de la ciudad durante una hora. El corte de tráfico originó importantes retenciones en la entrada a la ciudad por la Avenida de Santa Eulària.

Según el Ayuntamiento de Eivissa, el camión salía de las obras que se están haciendo en la calle Joan d'Austria cuando pasó sobre «un elemento que sobresalía y que provocó un agujero en el depósito». Por este motivo, el camión fue dejando a su paso pro Bartolomé Roselló un reguero considerable de gasoil hasta que los viandantes le avisaron de lo que estaba ocurriendo. Los primeros en llegar al lugar fueron los agentes de la Policía Local de Eivissa, que al ver la gran cantidad de gasoil que había sobre la avenida tuvieron que avisar a los bomberos, que cuentan con el material necesario para absorber el combustible derramado.

Los bomberos recogieron todo el gasoil que pudieron sirviéndose de una arena con gran capacidad de absorción de hidrocarburos denominada sepiolita. Según un agente de la Policía Local de Vila, en ningún momento se temió por la seguridad de los peatones de la zona, ya que el gasoil no es tan inflamable como la gasolina. No obstante, el fuerte olor a gasoil que se impuso en toda la zona alertó a los viandantes y comerciantes de la avenida.

Según explicó el conductor del camión a la policía, acaba de repostar 200 litros de gasoil en el depósito que se rompió, en el que previamente ya había combustible. La Policía Local investiga las condiciones en las que se produjo este accidente y si el depósito de combustible del camión cumplía con las medidas de seguridad exigidas.