Los funcionarios de Justicia esperan para hoy los resultados de una reunión del Consejo de Ministros en la que, según informó ayer el delegado en las Pitiüses del sindicato CSI-CSIF, Juan Nieto, deben pronunciarse acerca de sus peticiones para abandonar la huelga, que hoy concluye su tercera semana. La petición de los sindicatos consiste en un aumento de sueldo de cien euros en 2008 a contar desde el pasado enero, y otro de también cien euros a partir de enero de 2009, además de que el Ministerio no les descuente de sus nóminas estas tres semanas que no han trabajado.

Estos funcionarios de Justicia se han declarado en huelga a causa del agravio comparativo que padecen respecto a sus compañeros de las comunidades autónomas que ya cuentan con las competencias de Justicia transferidas, que cobran, según el CSI-CSIF. sindicato mayoritario en los Juzgados de Eivissa, unos 300 euros más que ellos cada mes.

En señal de protesta contra el Ministerio de Justicia los funcionarios cortaron ayer por la mañana el tráfico durante quince minutos en la avenida Ignasi Wallis, frente a la puerta de los Juzgados, una medida que tienen intención de repetir todos los días hasta que se llegue a un acuerdo y concluya la huelga. Nieto informó de que ayer se reunieron con la directora insular de las Pitiüses, Sofía Herranz, con el objeto de contar con los permisos legales necesarios para ello.

A estas alturas de la huelga resulta incalculable el número de juicios cancelados a causa de la disminución de la actividad. Según el CSI-CSIF, la media de seguimiento de la huelga en Eivissa, al igual que en el conjunto de Balears, es del 85%.

A pesar de que los servicios mínimos, tres de los cuatro Juzgados de Instrucción están completamente paralizados, así como cuatro de los cinco de Primera Instancia. También se suspenden bodas y trámites de divorcio y lo único que funciona al cien por cien es el juzgado de guardia.