Un hombre de 67 años, A.O.L, estranguló hasta la muerte a su mujer, C.F.M de 61, tras una pelea entre ambos. Los hechos se produjeron en la vivienda que ambos compartían en la localidad pontevedresa de Cangas do Morrazo, desde donde, después del crimen llamó a la Guardia Civil para entregarse y confesar el asesinato de su esposa.
El anciano no tenía antecedentes penales y tampoco había sido denunciado anteriormente por malos tratos. La muerte de C.F.M eleva hasta ocho el número de fallecidas en los que va de 2008 y convierte el mes de enero en el más 'sangriento' de los últimos cinco años.
Vecinos y familiares del matrimonio mostraron su «sorpresa» y aseguran que no se podían «imaginar algo así» hasta que se enteraron ayer por la mañana de lo sucedido.
Fue sobre las 9'30 horas cuando el cuartelillo de la Guardia Civil recibía una llamada que alertaba de lo ocurrido, por lo que los agentes de la Benemérita se personaron en el domicilio del matrimonio acompañada del 061, cuyos sanitarios certificaron la muerte de la mujer, sin que pudieran ya hacer nada por reanimarla.
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