Los agentes detuvieron al sospechoso en la propia Comisaría de Eivissa.

C. CUEVAS
Un hombre de 29 años, natural de Timisoara (Rumanía) y de nacionalidad austriaca, que responde a las iniciales C.C.F. resultó detenido en la Comisaría de Eivissa del Cuerpo Nacional de Policía después de que fuera a tramitar una documentación relacionada con su condición de extranjero. Según explica en una nota de prensa la propia Comisaría, el ahora detenido tenía una orden de arresto para extradición emitida en septiembre de 2002 por un tribunal de Timisoara por considerarle el responsable de un supuesto delito de agresión sexual en su localidad de origen.

Los agentes descubrieron la orden de detención al consultar la base de datos de Interpol cuando le tramitaban sus 'papeles'.

Según el informe recibido por la Comisaría de Eivissa, los hechos de los que se le acusa ocurrieron en 1999 cuando en el transcurso de una fiesta en su apartamento, C.C.F., que se encontraba bebido, intentó mantener relaciones sexuales con una joven en contra de su voluntad. Esta mujer logró evitar la agresión saltando desde un cuarto piso, lo que le produjo unas lesiones que tardaron en curar 90 días.

La Guardia Civil de Sant Antoni detuvo el miércoles a un italiano de 30 años, Mauro D., acusado de un supuesto delito de abuso sexual.

El sospechoso pasó el jueves a disposición judicial. En su declaración ante el juez de guardia, la presunta víctima, una joven francesa de 20 años, explicó que fue al hostal del italiano porque compartía habitación con un amigo suyo. Después de beber algo, los tres se fueron a dormir y pasados cinco minutos, la joven francesa se despertó con la cabeza del detenido entre sus piernas. Según esta declaración ella le dijo que no quería nada y él se apartó.