Los hechos ocurrieron de madrugada junto al retén de la Policía Local de Eivissa.

Los dos sospechosos, dos jóvenes de Eivissa, fueron localizados a menos de 250 metros del retén de la Policía Local pocos minutos después de que fueran vistos cuando apedreaban el coche patrulla, uno de los nuevos Xsara Picasso pintados con los colores de la bandera de Balears y que en el momento del ataque se hallaba estacionado en la calle Orvay, a pocos metros de las dependencias del 092. Se da la circunstancia de que uno de ellos fue rápidamente identificado porque una hora antes había sido multado por estacionar mal.

D.T.P. y su amigo G.G.M., ambos de 19 años, fueron sorprendidos poco antes de las cuatro de la madrugada cuando presuntamente atacaban al vehículo patrulla. Según la versión policial, un subinspector que estaba de guardia se asomó a una ventana de la Comisaría Local cuando escuchó gritos e insultos, al parecer, dirigidos contra la misma policía municipal. El oficial presenció también como un coche patrulla que había estacionado recibía el impacto de piedras que era arrojadas por los mismos individuos, algunas también contra la pared del edificio. Ambos salieron corriendo seguidamente, alejándose el lugar. Un primer examen, y a falta del peritaje final, reveló rasguños, abolladuras en el techo y daños en el puente de luces, destrozos que se supone superan los 500 euros.

La Policía Local localizó momentos después a D.T.P y a su compañero. Ambos fueron rápidamente reconocidos. Los dos mostraron presuntamente una actitud agresiva, la misma de la que supuestamente había hecho gala al menos uno de ellos una hora antes cuando el mismo oficial de policía le impuso un sanción administrativa por mal aparcamiento. A los dos jóvenes se les intervinieron sendos trozos de lo que se creyó era hachís, motivo por el que también fueron denunciados durante la instrucción de diligencias.