El alijo interceptado al suroeste de Formentera por el Servicio de
Vigilancia Aduanera (SVA), un organismo dependiente de la Agencia
Tributaria, iba a ser presumiblemente desembarcado en algún punto
de las costa del delta del Ebro y trasladado por carretera, según
estos mismos indicios, a algún punto del norte de Europa. La zona
del delta del Ebro, junto con el litoral de Castellón, son
escenarios habituales de desestiba de hachís.
La investigación, que avanza al respecto en esta dirección, ha
podido concretar que el «Quiet Waters», el pesquero de pabellón
británico apresado, zarpó de Alicante antes de cargar en algún
punto de Marruecos. Hasta ahora sólo había trascendido que el buque
había recalado en otras ocasiones en este puerto sin que se supiera
la naturaleza de su presencia en la costa levantina.
Las mismas informaciones recabadas en las últimas horas dentro
de las pesquisas que realizan funcionarios del SVA en Eivissa desde
hace un mes han servido ahora para descartar que Eivissa o alguna
de las islas de Balears entrara dentro de los objetivos del viaje
del «Quiet Waters». En este sentido, se ha podido definir que las
Islas sólo eran una zona de paso dentro de las 'autopistas
marítimas' que frecuentan los narcotraficantes europeos de hachís.
Los indicios apuntan a que una red eminentemente británica preparó
la travesía del pesquero interceptado.
Los últimos recuentos cifraban ayer entre 3.600 y 3.800 kilos la
cantidad que finalmente iba en las bodegas del barco
contrabandista. Los funcionarios de Aduanas de Eivissa llevaron a
cabo anteayer tarde un exhaustivo registro en el interior del
«Quiet Waters» al tiempo que completaron el resto de diligencias
con los detenidos, antes de su entrega al juez. Los agentes
mantenían ayer la operación abierta y encaminan ahora sus pesquisas
a intentar precisar las posibles conexiones internacionales de la
red, trabajando para ello con otros servicios aduaneros de
Europa.
Eivissa es hoy por hoy el puerto que lidera en el norte del
Mediterráneo la vanguardia contra el contrabando y el narcotráfico
marítimo. Ello es debido a que nuevos recortes en el SVA, según
denuncian fuentes sindicales, han conllevado la limitación de
horarios y la implantación de turnos rotatorios de vigilancia .
Dicha situación está provocando que la patrulleras de bases
importantes estén quedando varadas momentáneamente al destinarse su
personal a otras tareas. El nuevo sistema ha afectado ya a las
unidades de Barcelona, Palamós, Castellón, Valencia y Palma.
Aduanas, así, solamente tiene plenamente operativas por el momento
las unidades marítimas que operan en Eivissa y en el puerto de
Alicante, según las mismas fuentes.
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