David S.N., el joven valenciano vecino de Sant Mateu que fue
detenido el pasado lunes por la tarde por la Policía Local de Sant
Antoni instantes después de que tuviera lugar un incendio
presuntamente intencionado en el Camí de sa Vorera, ingresó ayer
tarde en la prisión de Eivissa después de que la Guardia Civil
agotara prácticamente el plazo para ponerlo a disposición
judicial.
El sospechoso negó en todos los interrogatorios que hubiera
causado un fuego a propósito y afirmó que el incendio surgió de
forma accidental. Según sus testimonios, ello sucedió después de
que se le hubiera caído una colilla encendida.
La instrucción del caso, sin embargo, acabará probablemente con
el sospechoso sentándose en el banquillo de la Audiencia Provincial
para ser juzgado ante un jurado. Los delitos de incendio forestal
están penados por el Código Penal con condenas de uno a cinco
años.
La detención de David S. N. tuvo lugar cunado precisamente la
Guardia Civil estaba llevando a cabo una serie de investigaciones
para aclarar una serie de incendios ocurridos en las últimas
semanas en la isla y que se cree posiblemente provocados. De hecho,
otra persona fue detenida días atrás por incendios ocurridos en el
municipio de Sant Joan.
Una de las pruebas que ha estado examinándose en la causa de
David S.N. es precisamente la aparición de distintas botellas de
plástico que se sopesa pudieron ser utilizadas para iniciar el
fuego con retardo tras introducir en ella papeles, sistema que
hasta ahora no se había relacionado oficialmente con algún incendio
habido en Eivissa.
El acusado, un joven con problemas que tenía antecedentes por
distintos delitos, pero ninguno por incendio.
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