Alberto Dorrego, director general para la Modernización de Justicia, clausuró el curso. Foto: V.F.

El director general para la Modernización de la Justicia, dependiente del ministerio cuya cartera comanda ahora José María Michavilla, Alberto Dorrego, aseguró ayer que en el sistema de videoconferencias que la Audiencia Provincial utilizaba con Eivissa y que fue cancelado tras una instrucción de la Fiscalía General se va a volver aplicar en las Islas.

Dorrego afirmó, además, que los juzgados de la isla contarán con todo los necesario para que se pueda aplicar con todas las garantías el nuevo plan con el que se aplicarán los juicios rápidos. Ello va a conllevar no sólo un aumento de infraestructura sino también de personal, especialmente destinado a reforzar las guardias. Este «paquete» de medidas también posibilitará la inmediata puesta en marcha del séptimo juzgado de primera instancia e instrucción, previsto en Eivissa para antes de acabar el año.

El responsable de Justicia señaló que el ministerio estaba trabajando en todos los frentes y barajando distintas fórmulas para resolver los problemas de espacio de los juzgados ibicencos. No adelantó la solución más factible que se estudia pero señaló con rotundidad que todas reformas y medidas podrán hacerse efectivas al cubrirse las necesidades que sufre la isla. Los «videojuicios» con la Audiencia quedaron suspendidos el pasado mes de febrero después de que la Fiscalía General del Estado ordenara a sus representantes no comparecer a este tipo de vistas al entender que podrían vulnerarse derechos fundamentales.

A ello se unió la protesta general de funcionarios y jueces por los problemas de espacio físico del edificio y el aumento de la jornada laboral, acarreando todo tipo de disfunciones. Dorrego, que indicó que entre septiembre y diciembre se van a distribuir en toda España más de cien equipos para videoconferencias, destacó que retomar las videoconferencias va ser posible tras consensuarse y limarse los inconvenientes de fondo y forma detectados con soluciones concretas. «Es una tecnología clave para lugares como Eivissa», sentenció.