La policía detuvo anteayer a un vecino de sa Penya al que se le
acusa de haber retenido contra su voluntad a una joven de 20 años
de edad y de violarla en tres ocasiones. El supuesto agresor sexual
retuvo durante 24 horas a su víctima, una mujer con residencia
fuera de este barrio, antes de que ésta lograra escaparse.
La joven, durante todo el tiempo que duró su secuestro, estaba
siendo buscada por agentes del Cuerpo Nacional de Policía después
de que su propia familia mostrara su preocupación por las extrañas
circunstancias que habían rodeado a su desaparición.
La realidad fue más terrible de lo que se pensaba. La propia
víctima, cuando Comisaría ya seguía distintas pistas para dar con
su paradero, comunicó a su familia que había sido estado
secuestrada por otro joven en una odisea que le llevó a estar
retenida en varios lugares hasta que logró su liberación. Al
parecer, uno de los escenarios del secuestro estuvo en una casa de
sa Penya. Según estas mismas informaciones, también fue llevada a
otras casas de Eivissa en el tiempo en que bajo amenazas su
presunto agresor le obligó a permanecer con él.
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