La macrodiscoteca Privilege, considerada como la más grande del mundo, está situada en Sant Rafel.

La Sala de lo Civil del Tribunal Supremo ha confirmado la condena a José María Echániz, socio mayoritario de la discoteca Privilege, a pagar 3,7 millones de euros a su socio minoritario, la Bahía de San Antonio S.A., por la gestión llevada a cabo en los últimos años.

En una sentencia fechada el 4 de julio de 2018, el Alto Tribunal ha desestimado los recursos de casación y extraordinario por infracción procesal interpuestos por el condenado contra la sentencia de la Audiencia Provincial de las Islas Baleares de 2 de marzo de 2016, que condenó al principal propietario de la discoteca a pagar casi 4 millones de euros por haber «incumplido los deberes inherentes al ejercicio de su cargo como administrador de Baltanxa S.A. (sociedad propietaria del 55 % de las participaciones de Privilege), siendo responsable de los daños que le ha causado».

Según la sentencia recurrida, queda demostrado que Echániz provocó un perjuicio a la empresa al firmar en 2010 un contrato de arrendamiento de la discoteca por un plazo de 15 años por 150.000 euros anuales con la empresa Cafecer S.L., «una renta que este Tribunal entiende muy por debajo de la de mercado». Echániz es administrador único y ostenta el 55 % del capital social de Cafecer S.L. La Audiencia considera probado «tanto el indiligente y desleal comportamiento del demandado como el daño causado a la entidad Balantxa S.A. al obstaculizar ofertas públicas y al no posibilitar la entrada de otros arrendatarios de la discoteca Privilege como alternativas a su empresa Cafecer S.L. más beneficiosas que la de ésta última y que ofrecían un precio de alquiler más elevado».

Cálculo del daño causado

Para el cálculo de la cantidad a pagar al demandante se ha comparado con otros negocios de discoteca contrastando el aforo correspondiente y la renta consignada en la documentación contable o contratos suscritos por Amnesia, Space o Boom.