En concreto, llegaron 7.158 visitantes de estos países en el primer mes del año, por delante de franceses e italianos, pese a que las visitas de los turistas de ambos países se duplicaron en enero. Hace cinco o seis años que Balears empezó a explorar el potencial de este mercado, que desde entonces ha crecido de forma exponencial y en el conjunto de 2017 se superó, por primera vez, el millón de turistas de los países nórdicos. De este modo, se consolidaron como el tercer mercado emisor de turistas extranjeros a las Islas, por detrás de Alemania y Reino Unido.
Mallorca es la isla que aglutina la mayoría del turismo procedente de los países nórdicos, no solo en invierno –debido a una mejor conectividad aérea que el resto de islas– sino a lo largo del año. El inicio de operaciones en Mallorca de la aerolínea Norwegian a lo largo del año ha favorecido la llegada de más visitantes de los países nórdicos, aficionados a actividades al aire libre como el golf, senderismo o cicloturismo.
Turismo residencial
Uno de los aspectos que motiva el incremento de llegadas de ciudadanos del norte de Europa es el turismo residencial. Cada vez son más los que optan por comprar una segunda residencia en la Isla, a la que se alojan sobretodo en invierno ya que el clima de Mallorca es más suave.
Así lo constatan los datos del Ministerio de Fomento, según los cuales la inversión inmobiliaria extranjera en Balears ha alcanzado máximos en los últimos dos años. Sobre este aspecto, desde la inmobiliaria Engels & Völkers constatan el aumento del interés de los clientes suecos, daneses y noruegos en la compra de una vivienda en la Isla, aunque alemanes y británicos copan los primeros puestos.
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