Los comerciantes del Mercat Nou han percibido un descenso en las ventas desde que, hace una semana, se decretara el cierre cautelar del aparcamiento subterráneo por motivos de seguridad ante las deficiencias encontradas en el techo.

La afluencia de clientes ha disminuido, tal y como aseguran los comerciantes consultados, en unas fechas tradicionalmente flojas y en las que muchos aprovechan para tomar vacaciones. Ése es el consuelo de los trabajadores del Mercat Nou, quienes esperan que el ayuntamiento reabra cuanto antes un parquin que da cabida a un centenar de vehículos y sin el cual están dejando de acudir clientes de otras zonas de la ciudad y de la isla.

Un claro ejemplo es el de una de las empleadas de Eiviss Garden, cuyos padres, mayores, solían acudir cada mañana al centro comercial para desayunar en la cafetería adjunta a la floristería. «Ya no vienen porque tienen que buscar plaza en zona azul, meter la matrícula, y son mayores. El parquin es más cómodo. Claro que se nota que lo hayan cerrado», admite esta trabajadora ibicenca.

Antes de entrar en el interior del Mercat Nou para sondear el ánimo de los comerciantes preguntamos a Carmen, encargada del puesto de la ONCE, quien lamenta que, con o sin aparcamiento, «hay poca gente durante todo el año». Cree que si hubiera ofertas del tipo ‘caña y tapa', «como en la Península», se animaría el mercado y sus alrededores. «Queremos que haya más ambiente y que se anime un poco la zona para que la gente acuda más», subraya.

Descontento general

Son las 11,30 de la mañana y no son pocos los clientes interesados en comprar, sobre todo, productos frescos como el pescado. Pero no los suficientes. «Sí que se ha notado que el parquin está cerrado, hace falta que lo abran ya», explica el encargado de Pescaderías Daniel, un pequeño pero bien situado local junto a la entrada principal del recinto. «Mis ‘clientitas' vienen igual, pero en general hace falta que vuelvan a abrir», puntualiza.

En Mar Fish Ramírez, la joven que despacha advierte de un descenso «de quizás el 20% de las ventas» en la última semana. «El viernes y el sábado, para ser fin de semana, no había gente», aclara mientras termina de colmar una gran red con mejillones.

A su derecha se encuentra Pescados Cardona Conchita, uno de los puestos con más clientela a estas horas de la mañana. Sus dos dependientas no parecen acusar el cierre del aparcamiento subterráneo. Ambas se alegran de tener una clientela fija «buena», que «sigue viniendo a buscar el pescado», pero no pueden ocultar su preocupación por si el cierre se prolonga: «A la larga sí que puede hacer daño. Esperamos que lo abran ya».

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Que la falta de aparcamientos afecta a los comercios del Mercat Nou resulta más que evidente tras un primer sondeo. A esto se añade que un buen puñado de locales están cerrados por vacaciones o cese de actividad, y que el resto trabajan de 07,00 a 14,30, en el mejor de los casos. No existe la suficiente demanda como para abrir también por las tardes.

En la panadería Can Sellaràs reconocen que desde el cierre del parquin «hay muy poco trabajo» y que se nota «un montón» el descenso en el número de visitantes. Y al igual que sus compañeros, la agradable comerciante suspira porque «se arregle cuanto antes» la situación. También en Frutas y Verduras Juanito creen que la clausura temporal «influye» en su negocio y, como muestra, su encargado sostiene que a estas horas (11,45h) suele haber más movimiento en el zoco ibicenco. «A la vista está que ha bajado la afluencia de gente», ilustra desde un puesto cercano Margari, de La Casa de los Jamones.

Acabando la ronda por el mercado, la propietaria de otra pescadería destaca que el cierre del aparcamiento no sólo les afecta a ellos, sino a los locales que hay en los alrededores. «Por la tarde en la zona había bastante gente aunque el mercado esté cerrado. Como llegue verano y estemos así, lo tenemos claro... Tanto nosotros como los clientes», advierte.


LA NOTA

Mañana, reuniones de la directiva con el alcalde y con los comerciantes

Los representantes de la sociedad Mercat Nou, S. L., mantendrán mañana por la mañana un encuentro con el alcalde de Eivissa, el socialista Rafa Ruiz, para conocer de primera mano el estado del techo del parquin y el periodo que permanecerá cerrado. Por la tarde, la directiva se reunirá con los comerciantes para trasladarles el contenido de la reunión.

Tras las catas efectuadas, los servicios técnicos están redactando un informe para evaluar el estado en el que se encuentra el techo, cuál es la solución más viable y también que se cuantifique la reparación del aparcamiento, así como el tiempo que se tardará en la obra.

Rita, encargada de la pescadería Can Rata y una de las representantes de la sociedad Mercat Nou, admitió ayer que el cierre del parquin “afecta mucho” tanto en su actividad como en los ingresos de la asociación por las tarifas del aparcamiento. Preguntada por si en la directiva confían en que el aparcamiento reabra a la mayor brevedad, Rita sentenció que “va para largo”. “Esperemos que se resuelva cuanto antes”, puntualizó la comerciante de un mercado que lucha por salir delante de este bache.