El flamante secretario general de UGT en Ibiza y Formentera, Pedro Campillo, aseguró ayer en el programa Bona nit Pitiüses de la TEF que el futuro de las Pitiüses pasa «primero por parar. Y después, decrecer. Ya lo dicen los propios empresarios hoteleros». Para el líder sindicalista, «es mucho mejor tener turismo de alta calidad y que sea referente mundial, pero primero hay que hacer una reflexión:¿cuánto aguanta la isla en número de turistas? Somos territorios frágiles y nuestro principal atractivo es, precisamente, nuestro territorio. Hay que equilibrarlo. No podemos entrar en una espiral de avaricia».
Campillo también señaló sentir «respeto por los empresarios y admiración por los buenos empresarios que saben crear riqueza y generar puestos de trabajo». Para el líder de UGT en las Pitiusas «el mayor valor añadido de cualquier empresa son sus trabajadores. El trabajador que está contento es el mejor valedor de su empresa».
El secretario general de UGT en las Pitiusas explicó que el gran problema de los trabajadores en nuestras islas es «no poder vivir con el fruto de su trabajo. Si ganan 1.500 euros y tienen que pagar 1.200 por el piso o tienen 50 años y tiene que compartir con gente de su edad, eso no es digno».
Pedro Campillo aseguró que los trabajadores no «quieren venir a Ibiza, es un gran problema, sobre todo los funcionarios públicos, que si les toca una plaza en Ibiza lo haces un desgraciado».
En cuando a la equiparación del plus de insularidad que han conseguido los funcionarios públicos que dependen de la administración autonómica, Campillo considera que «se tendría que hacer extensivo al resto de trabajadores», tanto del sector público como privado».
En este sentido, consideró que el objetivo del sindicato que lidera es «pelear para poder vivir como siempre hemos vivido y poder desarrollar un proyecto de vida con normalidad para mirar al futuro con esperanza e ilusión».
Campillo también habló sobre la proliferación de asentamientos en Ibiza por la problemática de la vivienda. «El primer día que lo ves te duele el corazón. No deberíamos permitirlo como sociedad, nos hace mucho daño, pero es el resultado de no haber tomado medidas en el pasado y el problema se ha ido enquistando. No hay una solución fácil».
En este sentido, Campillo destacó que su sindicato participa en la Mesa Insular de Bienestar Social del Consell d’Eivissa, donde aportamos nuestras ideas. Se van dando pequeños pasos, que ya está bien, porque lo importante es empezar a caminar aunque quizá yo sería más radical».
Pedro Campillo también es partidario de la «tolerancia cero con los pisos turísticos por su mala influencia en el mercado». El líder de UGT cree que aplicar la limitación de precios en los alquileres «parece que ha sido una herramienta útil en Cataluña, donde los precios han bajado. Sería una medida más».
En cuanto a la negociación del convenio de hostelería, Campillo señaló que UGT «es un sindicato de diálogo y tenemos al mejor cuadro sindical defendiendo los intereses de los trabajadores. Hay que darle tiempo a la negociación».
Campillo, que fue primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Eivissa con Xico Tarrés al frente, consideró que los sindicatos «tenemos que llegar a más trabajadores, ser una herramienta útil y dar respuesta a sus necesidades. Defendemos derechos que parecen consolidados y que no se van a perder nunca, pero de repente hay un arrebato y hay que volver a pelearlos. Tenemos que dar mejor servicio y ser una herramienta social para hacer un mundo mejor».
8 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Algo no cuadra. No creo que haya ningún empresario cuyo objetivo sea crear empleo. Otra cosa es, que empresarios y trabajadores se necesiten mutuamente. Es obvio que si el trabajador se planta, los empresarios no generarán riqueza ni empleo.
Una de put… y otra de gambas
Decir lo contrario a lo que se piensa , por un plato de lentejas...y mientras tanto, a seguir viviendo del cuento. Parásito.
vividor.
Y yo admiro los sindicatos de Europa que no reciben subvenciones de ningún gobierno y que se tienen que administrar con las aportaciones de sus socios y que son efectivos y no como aquí que son unos estómagos agradecidos y que sus liberados viven la gran vidorra padre.
Y las gambas.
Y yo admiro a los centauros y cíclopes que en compañía de las ninfas y minotauros heteropatriarcales hacen que las sindicalistas harpías cisgénero acompañadas de las esfínges doradas coman gambas en la misma mesa que José Álvarez, sus lacayos y mi unicornio ibicenco...
Razón tienen el Sr. Campillo y los empresarios que están de acuerdo con medidas para implementar el lema "primero parar y despues DECRECER". Solo así conseguimos una isla sostenible socialmente para trabajadores y medioambientalmente para todos los que residimos en ella