La Catedral de Ibiza se ha vestido de gala para conmemorar el 208 Aniversario de «su dedicación», es decir, el momento en el cual el antiguo templo parroquial de Santa María quedaba constituida como «iglesia madre y principal de toda la Diócesis».
Lo ha hecho con la celebración de la eucaristía, que comenzaba a las diez de la mañana, y que ha estado presidida por el obispo de Ibiza, Vicent Ribas, quien ha estado acompañado por el Cabildo Catedralicio. El resto de las parroquias de la diócesis también se han sumado a las celebraciones. Durante la jornada de hoy se ha comemorado que el 31 de enero, del año 1817, se promulgará la declaración como Catedral. Fue entonces cuando Felipe González Abarca, entonces obispo de Ibiza –lo fue entre 1816 y 1829– consagrara el antiguo templo de Santa María «en templo catedralicio».
El obispo, Vicent Ribas, ha asegurado durante la eucaristía que esta conmemoración «hace presente la respuesta del hombre a la petición de Dios de que haya un espacio para que los hombres puedan encontrarse con aquel que es Dios, Creador y Padre. Para facilitar y favorecer esa comunicación divina el templo es el marco que lo hace posible».
Un grupo de mujeres escuchando la misa. Foto: Irene Arango
Como curiosidad histórica destaca que fue en 1782 cuando se creó oficialmente el Obispado de Ibiza, por lo que pasaron 35 años hasta que la Catedral fuera consagrada. Como ha explicado durante la mañana del viernes Vicent Ribas, hace 208 años los pilares de la catedral «fueron ungidos con el santo crisma». De esta manera, Ribas ha explicado que la catedral se convirtió en «la casa de todos».
Pese a la solemnidad del evento, la hora matutina en un día laboral ha provocado que hayan sido en torno a una veintena de feligreses los que se han acercado a conmemorar un evento como este.
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