Un momento de la mesa redonda. Sobre estas líneas, José Antonio Llano, presidente de la patronal AVAT. | Irene Arango

El director insular de Turismo de Eivissa, Juan Miguel Costa, ha sido una de las autoridades que ha participado este martes en el X Congreso de Viviendas Turísticas Vacacionales de la isla. Un evento que se ha centrado especialmente en hablar sobre la lucha contra el alquiler turístico ilegal. En este sentido, Costa ha explicado que entre los proyectos solicitados al Govern balear, para ser financiados con fondos recaudados mediante la ecotasa, se encuentra una partida de 22 millones de euros destinados a combatir el intrusismo en el sector turístico. «Hemos solicitado esta financiación al Govern para poder incrementar la plantilla destinada que lucha contra esta práctica ilegal», según subrayó, resaltando que estos fondos del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) también servirán para externalizar una serie de servicios públicos como la tramitación de expedientes sancionadores contra los propietarios que alquilen sus viviendas de forma ilegal.

«El objetivo es destinar estos fondos a los ayuntamientos para poder crear departamentos específicos dentro de las policías locales con más personal y de esta manera combatir esta problemática. La idea es que haya un equipo coordinado de agentes e inspectores como hay en el Consell d’Eivissa para poder actuar, así como tramitadores propios de expedientes», según destacó, haciendo hincapié en la importancia de que estos equipos puedan estar coordinados por el nuevo director insular de Lucha contra el Intrusismo, Enrique Gómez Bastida. «Hay ayuntamientos como el de Vila y Santa Eulària que ya están trabajando en la tramitación de expedientes sancionadores urbanísticos a los propietarios de viviendas del municipio que estaban siendo alquiladas ilegalmente como turísticas», destacó Costa.


Tres años

En esta misma línea, ha especificado que esta partida de 22 millones se destinará a la lucha contra el intrusismo en colaboración con los ayuntamientos de la isla durante los próximos tres años. Una medida que ha adelantado el director insular de Turismo de Eivissa durante esta mesa redonda titulada ‘El destino turístico de la isla de Ibiza’ en la que ha actuado como mediadora la periodista Montse Monsalve y han participado como expertos José Antonio Llano, presidente de la Asociación de Viviendas Turísticas de Ibiza y Formentera (AVAT), Pedro Matutes, director general de Sirenis Hotels & Resorts, Alfonso Rojo, presidente de la Pimeef y el Managing Director Island Hospitality, Juan Antonio Martínez.

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Todos ellos profundiazon en el debate sobre la saturación turística que padece Ibiza durante la temporada, la actual turismofobia por parte de los residentes, la demonización del sector turístico de la isla, las necesidades de las viviendas vacacionales, la importancia del turismo familiar e incluso de cómo se ha «denostado» la clase media en los últimos años, entre otras reflexiones. En este sentido, tanto Llano como Matutes destacaron que el sector turístico de la isla está viviendo un momento «delicado» debido al intrusismo porque, según el presidente de AVAT, cada vez están recibiendo más ataques como consecuencia de la confusión que existe entre la oferta ilegal y la reglada.


«Pagando el pato»

«Como la oferta ilegal es un ente, parece que el turismo legal sea el culpable; el sector turístico está pagando el pato de la actual situación», lamentó Pedro Matutes, mientras explicaba que desde hace tiempo existe un creciente descontento social porque el turismo y las necesidades del residente se han desalineado. «Antes estas necesidades estaban alineadas al 90 % porque turistas y vecinos pedían lo mismo: playas limpias, una gran oferta cultural, seguridad… pero, en algún momento, estas peticiones empiezan a desajustarse y los residentes empiezan a exigir un decrecimiento turístico o la limitación de entrada de vehículos a Ibiza. Medidas que, tal como se plantean no son positivas», subrayó, insistiendo en que un decrecimiento «sano» sería implantar más instrumentos para poder combatir el intrusismo y la saturación turística provocada por la gran oferta ilegal que hay en la isla.

Sin ir más lejos, expresó que, durante un día de mucha saturación en agosto, la isla puede registrar hasta 320.000 personas, cuando en Ibiza hay únicamente 100.000 plazas legalizadas entre hoteles y viviendas vacacionales y, según Costa, la oferta reglada de alojamiento turístico no ha estado en todo el verano al 100%. «Todos estos turistas que no se han registrado, se han alojado en la oferta ilegal», recordó Llano, solicitando más medidas para hacer frente a esta problemática. No obstante, sí que resaltó algunas iniciativas por parte del Consell d’Eivissa como la implicación directa de los ayuntamientos para sancionar por la vía urbanística esta práctica o la colaboración entre Airbnb y el Ejecutivo insular para que se eliminen los anuncios con ofertas ilegales, aunque los participantes denunciaron que este acuerdo con la plataforma, que fue pionero en Ibiza, no es suficiente.


Airbnb

«Estas empresas son corresponsables solidarias y tienen que responsabilizarse más a la hora de publicitar únicamente anuncios legales», según subrayó Costa, afirmando que tiene que existir un acuerdo desde Bruselas para obligar a las plataformas como Airbnb a llevar un registro de los pisos turísticos. Al mismo tiempo que hablaban de las medidas más positivas, también han destacado algunas de las iniciativas más perjudiciales para el sector turístico, como la subida de la ecotasa en los meses de temporada alta que repercutirá en los turistas alojados en hoteles y viviendas vacacionales, pero no en aquellos turistas alojados en la oferta ilegal. «A un turista no le podemos responsabilizar de las inversiones que hacen falta. Queremos tener menos clientes y lo intentamos lograr subiendo la ecotasa; estamos lanzando un mensaje muy malo. En lugar de subir la ecotasa, se debería gestionar mucho mejor el presupuesto general del Govern balear y solucionar otras demandas», según precisó.