El sindicato explicó que, aunque se habían intentado tapar los nombres de la empresa con pegatinas, en uno de los camiones los adhesivos se habían caído, desvelando quién estaba llevando a cabo la recogida de basuras.
En los vídeos, los trabajadores espetaron a los conductores de los camiones que, al recoger la basura, les estaban «fastidiando».
Los representantes sindicales no descartaron que sean empresarios de la zona quienes hayan contratado algún tipo de servicio para tratar de minimizar los negativos efectos de la huelga. «Lo que se ha visto es mucha furgoneta recogiendo basura y mezclando los residuos. Nos piden reciclar y ahora todo vale, cuando es algo prohibido porque es un delito contra el medio ambiente», advirtieron.
En una rueda de prensa celebrada el sábado, desde CCOO ya aseguraron tener pruebas de que se estaban recogiendo residuos en la zona de Playa d´en Bossa, unos restos que después eran llevados de manera ilegal a un solar no acondicionado.
También en el puerto deportivo de Santa Eulària habrían sido vistos estos pequeños camiones retirando basura, probablemente por encargo de empresarios de la zona. «Queremos acabar con la huelga y, en teoría, este domingo debería haber alguien que se mueva. Nosotros estamos aquí», reiteraron desde el sindicato. En principio, ningún representante de la empresa contactó con ellos para retomar las negociaciones. Al cierre de esta edición, no se había producido ningún acercamiento entre las partes para poner fin a la huelga de residuos.
Desde el Ayuntamiento de Sant Josep, el alcalde Vicent Roig reconoció tener constancia de la intervención de los camiones de Valoriza en la zona de Platja d´en Bossa, aunque insistió en que el Consistorio no había contratado estos servicios. «Nosotros no tenemos ninguna relación contractual con Valoriza», sentenció el alcalde.
A diferencia de la primera noche, cuando sólo pudieron salir cuatro camiones por el mal estado del resto, en la segunda jornada los operarios pudieron disponer de 12 vehículos en total, tal como se estipulaba en los servicios mínimos. «Han tenido a un ejército de mecánicos arreglándolos», ironizaron desde el sindicato.
Ese mal estado que, según CCOO, presentaba el sábado de madrugada la flota de vehículos de las concesionarias Herbusa y UTE Es Vedrà marcó el inicio de la huelga indefinida en la recogida de basuras. «La sorpresa es que los vehículos tenían hoyos en las ruedas, auténticas barbaridades. No entiendo cómo están trabajando de esa manera. Ocho camiones tenían las luces de freno encendidas. Solicitamos ante ello la presencia de la Policía Nacional que tomó fotografías y se decidió que no salieran», comentó el secretario general de CCOO Hábitat Baleares, Miguel Pardo.
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