La reunión se ha celebrado este miércoles por la mañana. | Irene Arango

La recogida selectiva de residuos orgánicos aumentó en la isla de Ibiza un 9,69% en 2023 con respecto al año anterior. Así, según ha informado este miércoles el conseller insular de Gestión Ambiental, Ignacio José Andrés, se ha pasado de 9.348,18 toneladas de residuos orgánicos a 10.253,98. Unos datos que Andrés ha dado a conocer durante la celebración de la comisión técnica de seguimiento del Plan Director Sectorial de Prevención y Gestión de Residuos no Peligrosos (PDSPIGRE) y del Plan de Vigilancia del Área Ambiental de Ca na Putxa, celebrada en el Consell d’Eivissa.

Según ha explicado el conseller, Sant Joan ha sido el último de los municipios que se ha incorporado a este tipo de recogida, que ya tienen implantada en Eivissa, Sant Antoni y Sant Josep. Falta aún que se incorpore Santa Eulària, pero, según ha señalado Andrés, este municipio cuenta con un servicio de recogida puerta a puerta para productores singulares que también diferencia este tipo de residuos.

El conseller ha destacado que, en cifras totales, la recogida de envases también se incrementó en 2023, cuando se recogieron 7.334,85 toneladas en la isla, un 4,43% más que las recogidas en 2022. En lo que se refiere al vidrio y al papel y cartón, este tipo de recogida ha experimentado un leve descenso, del 0,93% en el primer caso y del 0,99% en el segundo.

A lo largo de 2023, la recogida de residuos urbanos en la isla ha sufrido una baja del 1%, pasando de las 80.245,40 toneladas recogidas en 2022 a 79.445,93 un año más tarde. La recogida diferenciada de papel, envases, vidrio y materia orgánica, por el contrario, ha experimentado un crecimiento global que ha permitido «poner en marcha el Área Ambiental de Ca na Putxa, llegando en 2023 al 32,34% de residuos recogidos en sus fracciones correspondientes, mientras que en 2021 era de un 27,48% y en 2022 un 31,53%», según ha indicado el Consell en un comunicado.

«Vamos en buena dirección para llegar a 2035 cumpliendo lo que marca el Plan Director de Residuos», ha señalado el conseller Andrés, «por lo que al vertedero han de llegar un 10% del total de residuos generados, mientras que ahora es del 57% y hace cuatro años era del 85%. Vamos por el buen camino».

Sin embargo, el conseller también ha señalado que es necesario reforzar la concienciación de los ciudadanos para este objetivo. En este sentido, Andrés ha indicado que «hay que mejorar mucho» y que la «concienciación ciudadana» ha de ser mayor en lo que al reciclaje se refiere. «Nuestros residuos son cosa de todos», ha añadido. Y es que, en estos momentos, un 40% de los residuos sólidos urbanos que se recogen deberían ser depositados en el contenedor de basura orgánica y no en el general. El conseller ha recordado que es «muy importante» que los ciudadanos sean conscientes de la necesidad de separar los residuos porque, en el caso de la materia orgánica, esta es reciclada para energía y compost. Si no, ha recordado, «se tira al vertedero».

«Hay que hacer más concienciación y educación ambiental», ha subrayado el conseller, «la gente tiene que saber que los residuos son un problema de todos y que su gestión redunda en el bienestar de todos. Reciclar es un bien para toda la isla». Si bien ha admitido que los ayuntamientos están trabajando en estas cuestiones, Ignacio José Andrés ha señalado que es necesario aumentar el esfuerzo porque se trata de una responsabilidad de la ciudadanía. Además, ha añadido, hay que tener en cuenta que la vida útil del vertedero de Ca na Putxa no va más allá de los ocho años y que, para poder alargar este periodo, es necesario reciclar.

Sobre el futuro del vertedero, finalmente, el conseller insular de Gestión Ambiental ha explicado que su departamento sigue trabajando en las posibles alternativas, entre las que se encuentran el traslado de residuos fuera de la isla y la incineración. Una vez que estas estén claras, serán expuestas a los ciudadanos y, posteriormente, «se tomará la decisión»