Si en 2019 se contabilizaban en Ibiza 7.837 plazas en viviendas de uso turístico, en 2023 se registraron 4.025. El descenso exacto es del 48,6%.

La demanda turística española registró el pasado año un «intenso dinamismo» manifestado especialmente en términos de gasto, siendo un 22,2% superior al contabilizado durante todo el año 2019, según datos de Exceltur.

En cuanto al 2024, el año ha comenzado con un crecimiento «desbocado» de las viviendas turísticas en destinos españoles, un fenómeno que se ha convertido en el principal causante del rechazo ciudadano al turismo por su impacto sobre el acceso a la vivienda, las molestias ocasionales o la banalización de los barrios más emblemáticos. Sin embargo, mientras en las principales ciudades españolas el número de plazas en viviendas de uso turístico se incrementó en el último año de manera considerable, el dato descendió hasta un 17% en Ibiza. Según el último estudio de Exceltur, en la isla existen 946 plazas en viviendas turísticas, 193 menos en comparación con las ofertadas hace un año.
En Mallorca, este dato se redujo también un 6%, mientras que aumentó en otros lugares como Barcelona (+11,8%) o Santiago (+19,4%).

Desde el Consell d´Eivissa consideraron ayer que esta reducción es fruto de la lucha contra el alquiler turístico ilegal en la isla de Ibiza. El conseller Mariano Juan resaltó la importancia del estudio de Exceltur puesto que surge del propio sector turístico nacional. «Es muy importante resaltar que ya a finales de 2023 se publicó un balance comparando ese ejercicio con el 2019, justo cuando se creó la Oficina de Lucha contra el Intrusismo. En la comparativa de esos dos años, el descenso llega al 49%, confirmando una tendencia en la reducción del número de plazas ofertadas en portales como Airbnb», comentó Juan.

Descenso de plazas

Si en 2019 se contabilizaban en Ibiza 7.837 plazas en viviendas de uso turístico, en 2023 se registraron 4.025. El descenso exacto es del 48,6%.

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El conseller se refirió a los frutos que ya están dando «la presión mediática y la pedagogía» que en los últimos años realiza el Consell en la lucha contra los alquileres turísticos ilegales. En este sentido, y debido a la comercialización ilegal de viviendas vacacionales, recordó los más de dos millones de euros recaudados en multas, los más de 170 expedientes abiertos y las casi 100 identificaciones de personas que Airbnb ha facilitado al Consell. «Pensaban que eran anónimas a la hora de anunciar pisos y ahora ven cómo están siendo multadas», reiteró Juan.

«Todo ello está causando que se retiren más anuncios de los que entran. Teníamos la sensación, pero ahora ya contamos con datos oficiales. No es una casualidad puesto que este fenómeno aumenta en todas las ciudades excepto en Ibiza y en Mallorca», señaló el conseller.

Juan no descartó que el descenso vaya acrecentándose en próximos estudios, principalmente debido a las nuevas herramientas con las que se están reforzando en el Consell en la lucha contra el alquiler vacacional ilegal. El conseller reiteró que no existe una varita mágica, aunque puede decirse ya que se está viviendo un cambio de tendencia en este asunto.

Prioridad

Coincidiendo con las palabras de Juan, el estudio de Exceltur señala que sólo en ciudades con una mayor concienciación ciudadana y, sobre todo, «con un mayor esfuerzo municipal y prioridad política para su ordenación y control, el crecimiento de las viviendas turísticas se sitúa en una tendencia razonable».

También, según datos de Airdna, en el primer trimestre del año se ha registrado un gran crecimiento en la oferta de viviendas turísticas hasta alcanzar niveles por encima de los máximos de 2019 y 2020. Por ello, desde Exceltur reiteraron la necesidad de impulsar una normativa nacional que ayude a hacer cumplir las leyes autonómicas y locales vigentes para regular esta oferta.