Más de 30 sanitarios logran un hogar gracias al Servicio de Coordinación de Can Misses

Imagen de archivo de una de las estancias de la residencia de Can Misses para profesionales sanitarios.

Vanessa Hernández03/03/24 0:30
TW8

Una treintena de sanitarios de Ibiza ha logrado una vivienda gracias al Servicio de Coordinación de Can Misses en sólo cuatro meses. Este es el tiempo que ha transcurrido desde que la Gerencia creara este organismo de intermediación entre los profesionales del Área de Salud de Ibiza y Formentera, que necesitan alojamiento, y los propietarios de las viviendas ofertadas.
«Esta figura se centra, especialmente, en poner en contacto a sanitarios que buscan casa con caseros que están dispuestos a alquilar su vivienda a trabajadores con este perfil», señalaron desde el Área de Salud a Periódico de Ibiza y Formentera, haciendo hincapié en que el objetivo de este servicio, coordinado por la profesional Inma Soler, es hacer de intermediario entre las dos partes: «La finalidad es ponerles en contacto; si cierran o no el acuerdo depende de ambos».


Analizar propuestas

Cabe recordar que esta figura se encarga de analizar y estudiar todas las propuestas que llegan por parte de los particulares, pero, sobre todo, tiene como función principal gestionar las necesidades de alojamiento de todos los profesionales sanitarios procedentes de fuera de las Pitiusas con el objetivo de recabar contactos de los propietarios interesados.
«Las condiciones pactadas son únicamente responsabilidad de ambas partes», insistieron. Además, este servicio, que fue creado para dar respuesta al grave problema de la falta de vivienda que tienen muchos sanitarios en Ibiza, ha recibido decenas de ofrecimientos de particulares dispuestos a alquilar sus habitaciones, pisos o chalets a precios más asequibles. Por su parte, también han sido varios los profesionales que se han puesto en contacto con este servicio en estos cuatro meses para buscar un hogar en la isla.

No obstante, todavía quedan profesionales que siguen sin solucionar el problema de la falta de vivienda en la isla. Algunos de ellos continúan alojados en la residencia para sanitarios de Can Misses. En este sentido, según dichas fuentes, actualmente, de las 12 habitaciones ubicadas en la planta baja del edifico J (antiguo Can Misses), hay ocupadas siete habitaciones por diferentes profesionales: «Ahora mismo tenemos alojados una médica internista, dos estudiantes de Mallorca de la Universidad de las Islas Balears que están haciendo el periodo de residencia, un hemodinamista y una enfermera del 061».

También explicaron que hay dos habitaciones más ocupadas por dos médicos internos residentes (MIR) que utilizan estas salas para descansar durante las guardias. «La semana pasada había dos habitaciones ocupadas más; una por un anestesista y la otra sala la estaba utilizando un familiar de un paciente de Formentera», señalaron e indicaron que el facultativo consiguió encontrar una vivienda estable en la isla y por eso abandonó la residencia y, en el caso del familiar, la persona hospitalizada recibió el alta y regresaron a Formentera.
Cinco habitaciones libres
Actualmente quedan cinco habitaciones libres en la residencia para sanitarios de Can Misses, ya que la Unidad de Media Estancia Ca na Majora, que actuaba también como residencia, está destinada ahora para pacientes que requieren mayores tiempos de estancia, como convalecencias y cuidados paliativos. Esta medida, explicaron, reduce la presión a las unidades de hospitalización de Can Misses, pero al mismo tiempo resta este recurso para ofrecer alojamiento a los profesionales contratados de fuera.
«Esta unidad es esencial para hospitalizar a pacientes crónicos que actualmente ocupan camas hospitalarias sin necesitarlo, para descongestionar el hospital Can Misses, que sufre episodios puntuales de sobresaturación», señalaron en su momento desde la Gerencia.
En esta misma línea, el Área de Salud de Ibiza y Formentera recordó a este medio la prórroga realizada, hasta en dos ocasiones, de la estancia de sanitarios en este espacio, que duró hasta finales de enero. «Reforzamos la residencia cada verano con el uso de Ca na Majora como residencia. Su cierre estaba previsto inicialmente a finales de octubre, pero se trasladó a finales de noviembre y después se prorrogó hasta finales de enero», señalaron dichas fuentes.
Cabe recordar que la residencia y la Unidad de Media Estancia Polivalente Ca na Majora ofrecían en total 41 habitaciones para uso residencial: la residencia dispone de 12 habitaciones y Ca na Majora, que también está ubicada en el edificio J, contaba con 29 habitaciones más.
Una medida que permite ofrecer un lugar de residencia temporal a los profesionales que vienen de fuera de las Pitiusas, principalmente para contratos de refuerzo estival y cubrir vacaciones. En este sentido, dichas fuentes subrayaron que la residencia ha permitido contratar a más de 300 profesionales sanitarios de todas las categorías desde que se habilitó.