Es el caso del vecino Joan Riera, quien, sin dejar de fijarse en el precio por kilo, señaló a este medio que «lamentablemente las comidas estarán marcadas por la inflación». «Muchos residentes tendrán que renunciar a ciertos productos tradicionales de estas fechas, como el marisco o el cordero, por esta escalada de precios», apuntó e indicó que ambos alimentos son los que más tienden a subir de precio, sobre todo la víspera de Nochebuena. Sin duda, la cesta de la compra es una gran «preocupación» para las familias ibicencas desde hace tiempo: «Vengo dos meses al mes y siempre compro lo mismo. Cuando reviso los tickets veo variaciones de hasta 12 céntimos», reveló el cliente Juan Antonio Adaniz resaltando que, viviendo solo, se gasta 170 euros al mes en hacer la compra.
Aumento del 20 %
Actualmente, se pueden encontrar las chuletas de cordero que se presentan en bandejas de más de 600 gramos por 15, 45 euros y una fuente de 100 gramos de gambas para plancha alcanza los 5,03 euros. Esto supone, en el caso de la carne, un aumento del 20% respecto a diciembre del año pasado y más de un 25% en el caso del marisco. «La carne de ovino es la que más se encarece antes de Navidad. Algunos tendrán que cambiar el cordero y el jamón ibérico por el pollo», lamentó este hombre. Sin ir más lejos, la carne de vacuno cuesta casi un 15% más que a finales de 2022 – más de ocho euros sólo 500 gramos- y la de ave un 18% más.
Precisamente a pocos metros de este vecino estaban colgadas varias piezas de jamón de cebo ibérico a 129 euros la pata, lo que significa una subida cerca del 4% respecto al año pasado. Otros productos típicos en Navidad son los entrantes como el foie, el salmón ahumado o el queso de untar. Mientras un tarro de 200 gramos de foie cuesta 14,65 euros, un paquete de 100 gramos de salmón vale 3,90 euros, un 13 % más que el año pasado en diciembre. «Optaré por comprar langostinos y gambones congelados», explicó un cliente resaltando que estos productos típicos «no pueden faltar en la mesa durante las fiestas navideñas».
Muy cerca de Joan Riera estaba la vecina Francisca García en la sección de carnicería. Esta mujer reconoció que, aunque pretende controlar los gastos, intentará hacer un esfuerzo estas navidades porque se trata de una tradición familiar muy especial. Es por eso que también prefiere anticipar la compra de ciertos alimentos porque no quiere cambiar sus hábitos de consumo renunciando a los productos esenciales de estas fechas. Esto mismo hizo la vecina Ana Rodríguez, quien ha decidido comprar semanas antes la caja de gambas para las comidas navideñas «porque actualmente ya te cuesta 30 euros la caja». «El precio de la carne y el pesado subirán, pero no voy a cambiar el menú de Nochebuena. Empezaré con unos entremeses, luego entrecot a la plancha o carne al horno porque a la mayoría no le gusta el pescado. Al día siguiente elaboraré un arroz marinera y canelones», agregó esta mujer.
Aceite a precio de oro
Por su parte, el precio del aceite de oliva virgen extra sigue registrando los máximos históricos del mercado con un precio que alcanza los 12,06 euros la botella de litro. Esto supone un encarecimiento de un 51 % respecto a diciembre de 2022, un incremento que en otros comercios alcanza una subida de más del 70 %. Por otra parte, el precio de la uva está en torno a los cinco euros y, según la dependienta de un segundo establecimiento, apenas variará de aquí a Nochevieja.
«Teniendo en cuenta la inflación estamos muy preocupados por los precios de los productos en Navidad porque se prevé que sea la más cara de los últimos años», explicó García. En este sentido, desde la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc) destacaron que la cesta de la compra actual ya cuesta más que la cesta de la compra navideña del año pasado. «Cuesta un 11,6 % más, a la espera aún de la subida por la Navidad», lamentaron. «Se gastará más por el incremento de precios, pero no se consumirá más», puntualizaron.
Además, agregaron que la medida del nuevo Gobierno de ampliar la reducción del IVA de algunos alimentos básicos, hasta junio del 2024, debería hacerse extensiva a carnes y pescados para incentivar el consumo de estos productos porque, según Aecoc, «acusan preocupantes caídas en el actual contexto de inflación». En esta misma línea se mostró la Federación de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), quien reclamó al nuevo Ejecutivo la necesidad de bajar el IVA en más categorías
6 comentarios
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Thor1Ji ji, si habrá que celébralo; de hecho yo lo estoy haciendo desde hace dias. Mas que nada porque las fiestas me las hago yo a mi manera NO cuando "TOCA"
Bueno, "Por lo menos no gobierna la derecha...", no?
"De los tontos viven los listos y los tontos de su trabajo"... Seguir así y terminaréis en la miseria TONTOS..
Mari Pili 123La " mejor inversión" ... NO COMPRAR NADA. Porque NADA es necesario y porque las " costumbres impuestas" y al parecer de "carácter obligatorio" no existen a menos que , la gente sea una mendruga y quiera hacer ricos a algunos caraduras. Se pueden comer langostinos en marzo y jamón ibérico en Julio ... Así que ... ajo y agua, mis apreciados tragones compùlsivos....
Me se de "algunos" que gracias a "nosotros" no van a tener carencias de ninguna clase. pero bueno, a base de "sablazos navideños" a ver si de una p vez se le quita la mania al publico de que en Navidad hay que atiborrarse de estos productos que no tienen NADA de tradicionales y si mucho de pura gula. ¿ No pueden comer langostinos en marzo y jamón ibérico en Julio? No, tiene que ser en Navidad. ¡¡ Si señor !! El Niño Jesús, sus papas y por supuesto, la mula y el buey comieron esa noche Chuletas de cordero de Galilea, salmón Ahumado a la Nazaret , Jamón Pata Negra "Dehesa de Jerusalén" y de postre Turrones y Mazapanes de la Estepa (rusa). ¡¡ Buen provecho tragones compulsivos !!
En casa la mejor inversion un arcón vongelador pewueño, compras von bastante antelación, congelas y que les den ahora al mercat, supermercado etc. Y salsa de nadal aun tenemos del año pasado en el congelador. Iatuuuuuu