Mónica Fernández, en los actos del Vuit d’Agost. | Arguiñe Escandón

El nuevo escenario al que se enfrenta Podemos tras los malos resultados en las dos últimas citas electorales ha envuelto en la incertidumbre a todos los trabajadores de la formación morada. Una incertidumbre política que mostró ayer, durante el Vuit d'Agost, la que fuera candidata de Podemos a la alcaldía de Sant Josep, Mónica Fernández.

Fernández adelantó a Periódico de Ibiza y Formentera que los integrantes de Podemos Ibiza se reunirán internamente una vez finalice agosto para abordar esta situación de confusión que llevan sintiendo desde que la dirección del partido anunciara un ERE para cerrar sus sedes en nueve comunidades. No sólo eso, también informó del despido de la mitad de sus trabajadores tras los resultados de las autonómicas y municipales que dejaron al partido sensiblemente dañado. En este sentido, Mónica Fernández indicó que, como todavía no hay una decisión tomada sobre el futuro de la sede que el partido tiene en Vila, esperan y confían en su continuidad. «Cuando tengamos la reunión interna, comunicaremos todo lo tratado entre los integrantes», explicó la que fuera candidata de Podemos a la alcaldía de Sant Josep. En este sentido, desde la formación morada también explicaron que seguirán haciendo política en Ibiza mientras se resuelve la situación.

Cabe recordar que la dirección del partido confirmó que prevé despedir a todos sus trabajadores de Baleares, alegando que la reducción de diputados tras las elecciones del 28M y el 23J supone un descenso de ingresos y tiene que recortar gastos. En concreto, revelaron que una «valoración inicial» de la situación sitúa las pérdidas en un 70 % a nivel estatal y en un 90 % aproximadamente en los territorios.