Al igual que sucedió en 2022 cuando el Govern no informó sobre el contenido de una campaña contra el turismo de excesos que presentó en Sant Antoni, hoteleros y responsables políticos de la isla se vieron ayer sorprendidos cuando acudieron a lo que, en principio, pensaban que iba a ser un acto para analizar la evolución del mercado británico en los últimos años (o eso, al menos, ponía en la invitación que recibieron las instituciones). Para sorpresa de algunos, asistieron a la presentación de una nueva campaña contra el turismo de excesos, que fue la convocatoria que recibieron los medios de comunicación.
Cabe recordar que el pasado año ningún representante del Consell o del Ayuntamiento de Sant Antoni acudió al acto organizado para dar a conocer Stick with your mates, una iniciativa creada por el Govern con la colaboración de la Embajada del Reino Unido en España. El objetivo era concienciar a los turistas británicos sobre la necesidad de evitar los excesos en sus viajes a Baleares. En aquella ocasión, también miembros de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (FEHIF) plantaron a los organizadores de la presentación. Todos consideraron que la acción promocional afectaba negativamente a la imagen de Ibiza y, particularmente, a la de Sant Antoni.
Tras el plantón del pasado año, lo curioso es que este año el Ayuntamiento de Sant Antoni recibió una invitación del Govern y del Consell d´Eivissa para el acto 2022-2023, retrospectiva y perspectiva del turismo británico en Ibiza. Hasta mediodía, el Consistorio portmanyí desconocía que lo que realmente se iba a presentar era la campaña para evitar el turismo de excesos diseñada para esta temporada turística. La misma convocatoria se remitió también a la patronal hotelera.
En relación al Consell, la institución sí fue informada de un cambio de última hora en la convocatoria del acto, confirmando que en esta ocasión iban a ir a la presentación de la campaña.
Fuentes de la Conselleria balear de Turismo reconocieron ayer a Periódico de Ibiza y Formentera desconocer los motivos por los cuales la invitación al acto había sido rectificada.
Desde la FEHIF, la presidenta Ana Gordillo quiso restar importancia a lo sucedido considerando que lo verdaderamente destacable eran los datos presentados por el cónsul británico.
Más molesto se mostró el alcalde Marcos Serra, quien reconoció que él había acudido a hablar de otro asunto diferente y no a participar en la presentación de una campaña contra el turismo de excesos. «Me ha hecho pensar en lo que sucedió el año pasado, que nos convocaron para una cosa y después fue otra», lamentó.
Serra aseguró no entender por qué a la prensa se la convoca para un tema y a las instituciones implicadas para otro. «Si quieren hablar del decreto de excesos, que lo digan claramente», espetó el alcalde, quien reiteró que «Sant Antoni no es Magaluf» y además «excesos hay por muchos sitios en Ibiza».
En esta ocasión, y por deferencia al cónsul, tanto el Ayuntamiento de Sant Antoni como el Consell d'Eivissa optaron por acudir al acto de ayer.
El presidente insular Vicent Marí señaló la importancia de trabajar con el Gobierno británico en campañas que fomenten el respeto y la seguridad de un destino como Ibiza, sin querer incidir tampoco en lo sucedido ayer con el Govern. «Hay que poner en valor el buen entendimiento con el Gobierno británico», concluyó.
Campaña
En relación a la campaña de este año, el cónsul general de Reino Unido, Lloyd Millen, destacó la importancia del mercado británico para la isla de Ibiza, que supuso en el último año el 32,5% del total de visitantes, cerca de 900.000.
También aseguró que, en comparación con el año 2018, el número de accidentes registrados entre el mercado anglosajón descendió un 87,5%, en el caso de Sant Antoni, y hasta un 90% en relación a Magaluf. Vistos los buenos resultados, animó a más hoteleros a participar en el proyecto que, un verano más, se desarrollará a través de las redes sociales.
En la presentación, el alcalde Marcos Serra explicó que el británico que veranea en Sant Antoni es un joven de menos de 34 años que suele disfrutar de las vacaciones durante una semana.
En 2022, el principal objetivo de la campaña era difundir entre los turistas británicos los principales puntos de la Ley de Excesos, aprobada por el Govern en 2020. Así, mediante folletos y pegatinas, los turistas iban a ser informados sobre cuestiones como que la ‘hora feliz' o los 3x1 en lo que a la venta de alcohol se refiere están prohibidos. También les prevenían sobre prácticas peligrosas como el balconing y se les explicaba que las sanciones por vulnerar la Ley de Excesos podían ir desde los 1.000 hasta los 600.000 euros.
El pasado año, sin embargo, la iniciativa no contó con el apoyo ni de las instituciones ni de los empresarios de Ibiza. Desde el Consell se consideró que el mensaje de la campaña «podría ser contradictorio». «Sant Antoni en particular e Ibiza en general», señalaron fuentes de la institución, «están haciendo un esfuerzo para dejar atrás esa imagen de turismo de excesos. Tiene que formar parte del pasado y así se le ha trasladado al embajador por parte del presidente Vicent Marí», explicaron.
A todo esto, en 2022 el Govern tampoco informó al departamento de Promoción Turística insular sobre el contenido de la campaña antes de su presentación.
14 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Vivimos del turismo de excesos toda la vida, fiesta, droga, alcohol y sexo por todas las Baleares menos Menorca que llevan toda la vida engancharos a la ginebra xoriguera, party boats, fiesta y todo lo demás es de lo que vivimos, la fiesta convive con el turismo familiar y tranquilo, tenemos fiesta para todas los poderes adquisitivos, todo lo demás es un paripé para demostrar que somos castos y puros y de forma hipócrita no queremos transmitir al exterior mala imagen, el que esté libre de pecado que tire la primera piedra
Según el PP, no queremos, ni somos un pueblo calificado como "turismo de excesos". Pues, nada más representativo de ese turismo de exceso ha sido ver esta primera semana de temporada una avalancha de banderas de turistas extranjeros en balcones de hoteles de cuatro y menos estrellas.. Que tipo de recibimiento puede tener un turismo "no de excesos" cuando nada más llegar al pueblo de San Antonio ,le reciben banderas en balcones, de todo tipo de paises. Existe una normativa clara donde se prohibe colgar banderas en los balcones de los hoteles. Por qué no la hacen cumplir. Por qué, no se le informa a los clientes que esta acción esta prohibida. El cambio de turismo, no es sólo decirlo en los medios, es hacerse respetar y hacer cumplir las normas. Evidentemente, esto no es la solución al turismo de excesos, pero es un granito de arena para erradicarlo
Si el Sr.Marcos Serra realmente piensa que Sant Antoni no es un destino de excesos y borrachera ¿ A qué fiestones debe asistir él ?
El modelo turístico del PP es ese: el de excesos. ya está bien de bajarse los pantalones ante los ingleses afincados en ibiza que no hablan ni tres palabras en español y ni una en ibicenco.
si no es engañando a los del ayuntamiento, no habria habido representacion publica. Es una de las estrategias de la asociacion vicio de ibiza, que es manipular la opinion publica para desviar la atencion en donde REALMENTE ellos sí incurren en un monton de graves excesos contra la poblacion : el exceso de oferta de tal actividad de la industria que desarrolan, con un exceso de horarios de la actividad, exceso de contaminacion acustica diurna de sus asociados en playas y espacios publicos, exceso de consumo de alcohol, sustancias estupefacientes en los locales de sus asociados, etc,etc,
Del turismo de los años 60 y principios de los 70 al actual hay un abismo.El de entonces era màs familiar,y tambièn se emborrachaban,porque con una sola libra se podìan tomar 6 o 7 cubatas,pero no armaban las broncas de ahora.Cierto que entonces no habia drogas màs allà del alcohol, y si las habia pasaban desapercibidas.Compartir con Mallorca consiste en que ellos se quedan con la parte del leòn y nosotros a verlas venir.Somos una autonomìa ficticia que no deberìa existir como tal.La realidad de cada isla es diferente y por lo tanto no deberìamos depender de Mallorca.
Lo que alguien debe hacer también es controlar la entrada de menores en los bares/discotecas en el West End. Entran con carnes de conducir y DNI de alguien mayor.
ha construido su estilo de vida sobre la base del turismo británico. ahora que eres mayor te quejas de los resultados de tus acciones. ¿Por qué tan ciegos e impropios son estos isleños una vez amistosos y acogedores?
Es lo que venden en sanan. Excesos y hoteles reformados más caros con la misma mierda en general.
Paripé +paripé La ineptitud política se harta de decir que no quieren turismo de exceso y luego la realidad es que ya lo tenemos aquí y nadie hace nada. La prueba la casa famosa de la calle Arenys de Mar (que ni si quiere tiene el distintivo de alquiler turístico),que ya está llena de energúmenos British y por mucho que denuncies por los ruidos y molestias, no pasa nada