El alcalde y candidato del PSOE a repetir en el cargo, Rafa Ruiz, hablando con acento andaluz ante los mayores. | Gisela Revelles

El alcalde de Ibiza y candidato del PSOE a repetir en el cargo, Rafa Ruiz, ha comenzado su campaña electoral este martes. Lo ha hecho aprovechando la fiesta de las Rutas Saludables. Un evento celebrado en Dalt Vila y al que han asistido cerca de 400 mayores procedentes de toda la isla de Ibiza. Se trata de una fiesta organizada por la Conselleria autonómica de Salud y el Consell d'Eivissa a través de su departamento de Asuntos Sociales y con la colaboración del Ayuntamiento de Ibiza.

Poco le ha importado a Ruiz que la cita tuviera como objetivo la promoción de las actividades saludables entre los mayores. Él ha preferido dar a conocer que una de las organizadoras de estas rutas, Estela Terrer, irá en su candidatura para las elecciones del próximo 28 de mayo. También lo hará, según ha asegurado, el profesor de baile Miguel Barranco, que ha sido el encargado de subir a Ruiz al escenario en el que minutos antes se estaba ofreciendo una master class de fisioterapia a los asistentes a la fiesta.

«Que sepáis que tanto Miguel como Estela están en nuestro equipo», ha dicho Ruiz, «los veo yo mandando más que el alcalde ya». Ruiz ha agradecido la asistencia de los mayores a la fiesta, ha dicho que la salud «hay que cultivarla» porque es «como las buenas plantas y los buenos frutos». También ha agradecido a Terrer y Barranco su trabajo y ha destacado las vistas del escenario. Todo en ello con un sorprendente 'deje' andaluz que ha llamado la atención entre los participantes en el evento. Y es que no se puede obviar que Ruiz es un catalanista de pro, que no emplea nunca el castellano en sus intervenciones públicas como alcalde y menos aún con el acento del sur de España. Es más, en su perfil de Twitter el alcalde tiene su nombre de pila en catalán y es prácticamente imposible encontrar algún mensaje suyo escrito en español.

Lo cierto es que Ruiz ha cosechado pocos aplausos entre los asistentes. Además, al primer edil no le ha gustado que, al bajar del escenario, algunos de ellos le preguntaran por la grave crisis que está sufriendo la sanidad en Ibiza y que está perjudicando especialmente a los enfermos de cáncer. «No le ha gustado lo que le estábamos preguntando», ha dicho uno de estos mayores a Periódico de Ibiza y Formentera, «y se ha ido. Se ve que no le ha agradado ver que había poco clamor popular».