Fotograma del documental.

«No podemos estar más contentos porque es el broche perfecto para un documental como Salka en la tierra de nadie». Así de contundente y alegre se mostró este viernes a Periódico de Ibiza y Formentera el productor y director de documentales catalán, afincado en Ibiza, Xavi Herrero, al saber que su trabajo despedirá su recorrido por festivales en el prestigioso Global Migration Film Festival.

No le falta razón. Este festival está organizado por la Oficina Internacional de la Migración (IOM-OIM) de las Naciones Unidas y se desarrolla a nivel global en todas las sedes que esta oficina tiene en el mundo. Se celebra desde este viernes 10 de diciembre y hasta el próximo 18 del mismo mes, coincidiendo con el Día Internacional del Migrante que se celebra precisamente el sábado que viene.

La producción de Herrero se podrá ver gracias a delegación en Ecuador de la Oficina Internacional de la Migración. La cita es en la ciudad de Guayaquil aunque según aseguró este viernes el director catalán, se está pendiente de la evolución de la pandemia del coronavirus en la región. Un hecho que, también, ha impedido que él mismo se pudiera desplazar hasta el país ante una posible imposición de cuarentenas o cierre de fronteras.

Rodado en Mauritania
Para rodar Salka en la tierra de nadie el director se marchó hasta Mauritania para contar una historia que aunque parece de ficción es tremendamente real. A través de la figura de Salka, una joven que decide emigrar a Europa en busca de un futuro mejor disfrazada de hombre y cruzando todo el Sáhara sobre el tren más largo del mundo hasta llegar al Atlántico, se aborda la realidad de uno de los países más pobres del continente, aislado del mundo y con grandes desequilibrios sociales provocados por una tierra árida y sin esperanza para la mayoría de sus habitantes. Eso, sin olvidar, a las mafias y el contrabando, que imperando con total libertad hacen aún más difícil la vida para las mujeres mauritanas.

Además, Herrero se convirtió en el primer occidental que fue capaz de realizar el trayecto de ida y vuelta en este tren de la SNIM, conocido como el tren del desierto, a lo largo de 1400 kilómetros y temperaturas que pueden llegar hasta los 50 grados centígrados.

Desde que se estrenara en 2020 en el Festival Internacional de Cine Documental de BarcelonaDocs Barcelona gracias al apoyo del Consell d'Eivissa y del Ayuntamiento de Sant Josep, el trabajo ha sido seleccionado para participar en numerosos festivales, algunos de gran importancia y compromiso social como, por ejemplo, el Festival Internacional de Derechos Humanos en Colombia. Además, fue finalista del Premio Amnistia Internacional Catalunya para documentales comprometidos y premiado como Mejor Documental Internacional en el FICMA de Ciudad de México.
Además, actualmente se encuentra en el catálogo de Filmin.