Miquel Company, durante la entrevista. | Daniel Espinosa

El conseller de Fondos Europeos, Universidad y Trabajo, Miquel Company (Maó, 1985), visitó Ibiza el pasado viernes por segunda vez desde que ostenta su cargo en el Govern balear. También fue la segunda vez en su vida. En seis meses la conser ha puesto en marcha toda una estrategia y un equipo especializado en el trámite de financiación europea. Ha sido la respuesta del Govern ante el plan de recuperación para Europa NextGeneratiosEU, un ambicioso proyecto de inversión que la Unión Europea ha puesto en marcha para transformar el continente. En juego hay 750.000 millones de euros que buscan crear una Europa más ecológica, más digital y más resiliente.

—¿En qué punto estamos del plan de recuperación para europa NextGenerationEU?
—Ahora mismo, a través de la conselleria de Fondos Europeos, trabajamos en la plan balear transversalmente y de forma coordinada con las demás consellerias e instituciones. Tenemos sobre la mesa más de 500 proyectos o ideas que nos llegan a la conselleria para aplicar estos fondos en la modernización y la diversificación económica. El montante total de los proyectos que tenemos es altísimo, supera los 5.000 millones de euros, pero se debe tener en cuenta una cosa, estas inversiones ahora deben integrarse en el ‘Plan España Puede', que responde a la necesidad de transformar la economía española y por tanto es un plan de país. Los objetivos de este plan los fija el Estado y luego las comunidades autónomas serán las que ejecutarán el plan. Esta visión de la necesidad de hacer una transformación digital, de impulsar la eficiencia energética, la cohesión social o la igualdad de género, es una línea de trabajo que el Govern desarrolla desde hace años, por ello estamos muy dedicados a este proyecto.

—¿Cuándo debe estar lista esta propuesta?
—En julio queremos tener ese plan, pero sería un error tener un plan cerrado a finales de julio cuando creemos que tiene que ser un documento vivo. Es una primera propuesta trabajada desde la parte política pero también desde la parte social y económica, en la que han participado consells y ayuntamientos, cámaras de comercio, entidades del tercer sector y los partidos políticos de la oposición, dentro del pacto de reactivación, excepto PP y Vox que no han querido participar. Ya hemos visto que ni están ni se les espera en el sentido de remar todos en la misma dirección en materia de fondos europeos, van a la contra. Es una lástima para el futuro de esta comunidad.

—¿Qué respuesta ha tenido Ibiza?
—Ibiza ha presentado bastantes proyectos, sobre todo centrados en la rehabilitación y puesta en funcionamiento del espacio de Sa Coma y otras actuaciones en espacios públicos que en cierta manera también responden a las posibilidades de financiación europea. En el encuentro con el vicepresidente del Consell y posterior con el presidente [el pasado viernes] les he hecho patente una realidad: no porque haya ahora los fondos NextGen hay que jugarlo todo a esa carta. Lo que es muy importante es saber estrategicamente qué se quiere para el territorio, por tanto, cuando son proyectos importantes con un apoyo público la posibilidad de financiación es variada. NextGen es una pata, pero tenemos fondos europeos estructurales, fondos propios, ITS… nosotros ahora ponemos la presión en el proyecto para que pueda ser financiado por diferentes mecanismos. NextGen funcionará de diferentes maneras y habrá convocatorias de concurrencia competitiva dirigidas a ayuntamientos, a comunidades autónomas y empresas. Aquel proyecto que presente un promotor, por ejemplo una empresa de Ibiza, se presentará en aquella convocatoria de concurrencia competitiva con su proyecto de digitalización. Los mecanismos son similares a los habituales de la administración, pero todavía están por definir. Es comprensible que existan dudas y nervios respecto a cómo evolucionará el proceso, pero estoy seguro de que los proyectos saldrán adelante. Desde julio a diciembre ya se irán publicando las diferentes convocatorias.

—¿Cree que se han coordinado adecuadamente con el Consell?
—Hay que tener en cuenta que no estamos al final del camino, sino más bien al principio. Europa lleva apenas un año construyendo esta respuesta que son los fondos de resiliencia. La coordinación y el diálogo siempre han existido entre las instituciones y a nivel balear hemos tenido con el Consell d'Eivissa varias reuniones en las que hemos podido hablar de este tema. Hace dos meses vine a la isla a recibir los proyectos, ahora hemos tenido otra oportunidad para ello y se han creado diferentes comisiones para que los consells participen en la elaboración del plan y la definición de los proyectos. Siempre hemos buscado la transparencia y transmitir toda la información que tenemos en la Comunidad Autónoma. Con todos los consells insulares hemos trabajado bilateralmente y ahora ponemos en marcha estas comisiones. Lo que queremos es que todos los promotores posibles que se puedan beneficiar de estas líneas tengan proyectos preparados para poder obtener la máxima financiación posible.

—El comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, comentaba en una entrevista esta semana, publicada en la Vanguardia, la dificultad que podía tener España a la hora de absorber toda esta inversión, ¿Baleares está preparada para ejecutar los proyectos que implican todos estos millones de euros?
—Respeto las palabras del comisario europeo, pero estas dificultades no las tendrán sólo España o Italia. Se ha movilizado una cantidad inaudita de dinero en Europa. Vamos un paso pesimista por delante en lugar de poner en valor lo que se ha hecho. España es el primer país que ha presentado un plan, un documento que ha tenido muy buena acogida en Europa. Un plan no sólo de inversión, también de reformas. El compromiso de España y de Baleares es gestionar el máximo de inversión posible. Es cierto que el sistema público tiene muchas veces dificultades para ser lo más ágil posible, que es lo que ahora mismo se necesitaría. El marco temporal que tenemos es 2020-2026. En Baleares aprobamos ya el año pasado un decreto para agilizar, priorizar e incrementar plantillas precisamente para agilizar la gestión de los fondos europeos y si hace falta se harán modificaciones y haremos el máximo esfuerzo. Será difícil, sí, pero también lo es para el sector privado. Cuando tienes una oportunidad de esta magnitud los retos son enormes y tenemos que dar pasos para la agilización. Quizás sea un buen momento para replantear todas estas cuestiones y lograr mecanismos más ágiles, por tanto bienvenida sea esta oportunidad. No tengo ninguna duda de que España y Baleares darán una respuesta adecuada a este reto. Baleares es líder en gestión de fondos Feder, cuando veníamos de tener que devolver dinero y hacer obras que no calificaré. Tenemos un cuerpo técnico especialista y muy preparado que trabaja en dar formación y reforzar equipos.

—Dentro de estos fondos europeos la inversión en cultura es de un 0,2 %, ¿qué le parece esta proporción como conseller de Cultura?
—Nosotros planteamos que la cultura es un pilar de la cohesión social y de la recuperación. Es un elemento fundamental, es evidente que desde un punto de vista cultural nos gustaría tener más oportunidades de inversión. Pero tampoco querría dejar de explicar que, aunque haya un 0,2% de todo el mecanismo destinado a cultura, eso no significa que el sector cultural no se pueda beneficiar del resto de los fondos. Quiero decir, cuando hablamos de medio ambiente, movilidad, accesibilidad o recuperación de espacios urbanos, todo esto puede beneficiar también al sector cultural. El sector cultural recibirá más del 0,2% de los fondos europeos. Me gustaría que fuese más, pero podemos aprovechar los fondos destinados a otros componentes para que repercutan en el sector cultura, que creemos que tiene que ser un motor de recuperación económica y social.