Sant Antoni, la cara, y Sant Josep, la cruz. El primero fue el municipio donde más bajó la tasa de criminalidad (-15 %), mientras que el segundo fue el único de la isla que registró un repunte de los delitos (7,7 %), según los datos del Balance de Criminalidad facilitado por el Ministerio del Interior, correspondiente al primer trimestre de 2021.
Baleares registró 12.544 delitos y faltas entre enero y marzo, un 12 por ciento menos que en el primer trimestre de 2020, con descensos sobre todo en los robos con violencia o intimidación, con 113, un 45 por ciento menos.
Por islas, los delitos han bajado en Ibiza, Formentera y Mallorca y han subido en Menorca.
En Ibiza se han cometido 1.608, un 5,8 por ciento menos, y en Formentera 69, un 12,7 por ciento menos.
Los datos de los municipios de más de 20.000 habitantes reflejan descensos en Sant Antoni (15%), Ibiza (7,2 %) y Santa Eulària (7 %). Sant Josep registró un repunte del 7,7 por ciento.
La tasa de criminalidad ha descendido a 49,5 delitos por cada mil habitantes en las islas, 1,8 puntos en un trimestre, frente a los 67,2 en los primeros meses de 2020 y los 51,3 registrados a finales de diciembre. Por tipología, los robos con violencia o intimidación bajan un 45 %, los delitos de lesiones y riña tumultuaria un 39,9 % (con 89 casos); los robos en domicilios descienden un 15,4 % (con 589), las sustracciones de vehículos un 26,6 % (con 196), los hurtos caen un 26,5 % (se han cometido 2.224) y el tráfico de drogas desciende un 6,7 % (con 70 delitos).
Por el contrario, aumentan un 29,4 % los delitos contra la libertad e indemnidad sexual, con 154 casos; y las tentativas de homicidio o asesinatos, de los que se han contabilizado 6 casos de enero a marzo (uno más que en el primer trimestre del año pasado).
1 comentario
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Pot ser que hi hagi hagut una petita davallada en alguns municipis de s'illa, però no mos enganyem; en general, sa tasa de criminalidat no para de créixer. Són ses conseqüències de sa globalització, sa multiculturalidat. Per desgràcia és es nostro futur.