Los empleados de la industria turística de las Pitiusas tendrán que esperar su turno para ser vacunados. La conselleria balear de Salud del Govern ha solicitado ante la Comisión de Salud Pública, en la que están representadas todas las comunidades autónomas, un incremento de las dosis para la población residente en el archipiélago balear, pero no contempla trasladar a este organismo la reclamación específica y unánime del sector empresarial de Ibiza y Formentera para que los trabajadores de los hoteles y de la restauración tengan prioridad en el proceso de vacunación, una iniciativa que cuenta con el respaldo del Consell d'Eivissa.
«Somos conscientes de estas peticiones y de la inquietud que hay en el sector turístico de Ibiza, pero la estrategia que debemos seguir es la que marcan los expertos del Ministerio», expresó ayer un portavoz de la conselleria de Salud, quien recalcó que el Govern ha reclamado más vacunas y la mayor agilidad posible en su reparto, pero siguiendo los criterios de preferencia según la edad, una vez que ya hayan sido vacunados los diversos grupos de sanitarios y profesionales que se encuentran en mayor riesgo de contagio.
El Govern se ciñe a la estrategia de vacunación que marca la Ponencia de Vacunas, el organismo de expertos que estudia la situación epidemiológica en España y las medidas destinadas a su control, y del que forma parte Antònia Galmés, técnica en coordinación autonómica de vacunación. La Ponencia lleva a cabo las evaluaciones científico-técnicas de las vacunas autorizadas y las revisiones periódicas de los programas de inmunización «apoyándose en la evidencia científica», como enfatizaron ayer fuentes del Ministerio de Sanidad.
Los resultados de las evaluaciones, las modificaciones en el calendario común de vacunación o la estrategia a seguir deben ser posteriormente acordadas por la Comisión de Salud Pública, en la que participa la directora general de Salud Pública del Govern balear, Maria Antònia Font. Este organismo actualiza semanalmente sus instrucciones, que afectan, por el momento, a todo el territorio nacional. Por último, esta comisión traslada sus conclusiones al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), en cuyo pleno representa a las islas la consellera de Salud, Patricia Gómez. En última instancia, es este consejo el que decide las prioridades.
«La consellera se reúne periódicamente con todos los sectores afectados por la crisis y conoce de primera mano la situación que está viviendo Ibiza, pero los organismos competentes no contemplan ahora mismo ningún tipo de preferencias que no sean las que marca la edad, que es el factor de mayor riesgo», precisan fuentes del Govern: «Si no hay vacunas para todos, no tendría sentido que estuviera vacunado antes un camarero de 20 años que un señor de 70».
El Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social recordó ayer que ya se han realizado cinco actualizaciones relacionadas con los diferentes grupos que deben ser vacunados con prioridad y que los organismos que deciden la estrategia para frenar el avance de la pandemia se reúnen semanalmente para establecer los criterios. Fuentes gubernamentales revelaron asimismo que, en los últimos días, los pescadores de Galicia, agricultores de Andalucía o los sindicatos de actores, entre otros colectivos, se han dirigido al Ministerio con la misma pretensión que los empresarios y el Consell d'Eivissa.
8 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Lo prioritario es la franja de edad entre 60-80 años...que son los que tienen patologías y son los que ocupan las UCIS mayoritariamente...después lo otro ya es discutible...cierto es que en Eivissa y Formentera con unos 150.000 habitantes ya podríamos estar todos vacunados...pero nada...interesa más Andalucía...o es que quizás Armengol no ha hecho bien su trabajo con …eso que son del mismo partido...
María, piensa, en esta Isla todo es una cadena, si la hostelería no funciona no funciona nada es el efecto domino, pero claro nos convencen de lo contrario y hay que ser el borreguito De Vicente que hace lo que dice la gente......
En las islas hay un % elevado de personas oficialmente residentes que no residen todo el año, residentes todo el año que no lo son oficialmente y una ingente cantidad trabajadores que llegan por la temporada legal o ilegalmente. Los laboratorios que fabrican las vacunas no son hermanitas de la caridad, quieren ganar dinero y cuanto más y más rápido y por adelantado mejor. Y nuestros clientes y proveedores miran por lo suyo. Encajar los bolillos.
Ya sabemos porqué, si aquí gobernara alguno de sus secuaces tranquilos que habrían dicho que sí. No pueden permitir que alguien del otro bando tenga una buena idea y pudiera tener buenos resultados. No les interesa.
El turismo es el motor económico principal de la isla, no hay duda, pero... por qué habría que vacunarles antes que a los trabajadores de los supermercados? por ejemplo!!! Acaso no hemos comido todos durante todos estos meses?!? Además de gasolineras, repartidores, librerías, ópticas, barrenderos, ... siempre focalizando un solo sector y así nos va, LA ISLA ENTERA ES PRIORITARIA,
Al jefe no hay que molestarle.
Muy bien explicado Fernando, es a lo que estamos abocados ,muchos se conforman con esas migajas gubernamentales , limosnas que no significa más que una caza del Voto conformista y sumiso y en donde se demuestra que una gran parte de la sociedad de este país no quiere saber nada de superación y búsqueda de retos en la vida y así nos va. Por otro lado a la petición de vacunar al sector de la hoteleria, alguien se esperaba algo del Govern?? Pues ahí está la respuesta sólo sabemos ponerles la alfombra roja cada vez que pisan las pitiusas. Dan de lado al principal motor de esta comunidad autónoma que es el turismo a no ser que de aquí a un tiempo se cambie a otro modelo económico como la recogida de piedras para poder comer.
Hay que aprovechar la pandemia para conseguir cuantos más pobres mejor, pobres dependientes de la paguita mensual, como es el ingreso mínimo vital o los ertes. Estos pobres son fácilmente manipulables y votarán lo que les digamos. A las empresas no hay que darles nada porque el trabajo que ofrecen, libre e independiente es la puerta para desarrollarse y pensar diferente.