Descontento por la mala accesibilidad y conexión del tramo de Ca na Negreta

Sin embargo, hay cierta incertidumbre sobre qué ocurrirá con la reforma de ese tramo. Por una parte, el Consell reclama que el Consistorio, a cargo de Carmen Ferrer, se haga cargo de estas obras, mientras que la oposición socialista en Santa Eulària reclama que sea el Consell quien disponga el presupuesto para concluir íntegramente las obras.

En este sentido, el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Santa Eulària, también critico el retraso de las obras debido al parón sufrido en el estado de alarma.

Descontento
Diferentes vecinos y comerciantes de la zona de ca na Negreta expresaron su descontento con las obras que afectan directamente al tráfico en la zona. Muchos afirmaron desconocer las desviaciones iniciales, hecho que desembocó en una situación de «caos» en el tráfico durante los primeros días.

Un camarero del restaurante Sa Barda, se quejó de que las obras han hecho que la clientela disminuya en el establecimiento: «Los primeros días se notó mucho. La gente, como se perdían al llegar, optaban por no venir», lo que preocupa especialmente, dado que muchas personas que no son de la zona de Jesús, también visitan el restaurante. Sin embargo, estas obras favorecerán, a largo plazo a la generalidad de población, comprende el hostelero: «Para hacer la tortilla, antes hay que romper los huevos», ríe, y admite que ahora «la situación se ha ido normalizando poco a poco».

En la misma línea se expresaron ayer a Periódico de Ibiza y Formentera Pilar y su marido, que residen en Sant Carlos y pasan por Ca Na Negreta habitualmente, sobre todo cuando tienen que hacer alguna gestión en el centro de Ibiza. «Solemos tardar mucho en general y creemos que esta obra, a la larga, nos va a beneficiar». Y es que en el tramo desde Jesus hasta Santa Eulària se producen muchos embotellamientos de forma habitual, «sobre todo en verano sabemos que tenemos atascos, aunque ahora este desvío es algo más temporal y nos adaptaremos».

Por lo tanto, ellos sí que han notado dificultad para acceder a ese tramo concreto, aunque han notado cierto alivio en las retenciones de la zona de obras de la carretera principal, sobre todo «respecto a otros días».

Por su parte, María, trabajadora de una casa en la zona de Ca Na Negreta, cree que es algo «temporal» y que hay que tomárselo «con calma». Sin embargo, su queja va dirigida a los inconvenientes que se han creado para los usuarios de autobús: «Yo lo cojo todos los días para ir y volver de trabajar y el primer día, nadie me había avisado del cambio de ruta y esperé una hora de reloj en una parada equivocada», lamentó. Además, relató que la marquesina donde suelen esperar el autobús se encuentra inutilizada y que tienen que esperar «casi en medio de la carretera y al sol» cada día.

Por si fuera poco, tanto ella como otra usuaria de la línea de autobús Santa Eulària-Ibiza, se quejaron de que la parada es la misma tanto para la ida como para la vuelta y que, cada vez que se acerca un autobús, «tienen que preguntar al conductor hacia dónde va».

«La primera semana, no lo sabía y me subí al primer bus que vino y volví a hacerme el camino de vuelta hasta que pude pararme en otra parada a esperar 15 minutos más al siguiente autobús de bajada hacia Ibiza», se quejó .

Finales de verano
En principio, tal y como apuntó Mariano Juan hace un par de semanas, las obras de la carretera de Ibiza a Santa Eulària estarán prácticamente acabadas «entre finales de septiembre y principios de octubre». Por lo menos este es el objetivo del equipo de gobierno, aunque la idea inicial era culminar el desdoblamiento de la transitada vía este mes de julio aunque, por causas externas, como el parón de la actividad a causa del confinamiento, que ha obligado a retrasar la entrega final de las obras. Por otra parte, el Consell matizó que la obra se irá abriendo por tramos y no será de golpe.