Un momento de la bendición de carros con motivo del día grande de Sant Cristòfol. | Marcelo Sastre

Es Canar vuelve a celebrar sus famosas fiestas locales de Sant Cristòfol, pero, este año, con las medidas de seguridad adecuadas.

Antiguamente, esta fiesta era para celebrar que los payeses de Santa Eulària y Sant Carlos habían acabado de segar, y los vecinos iban a celebrarlo con una paella junto al mar. «Ahora, en cambio, es para lucirse y hacerse ver», explicó Toni Sendic, técnico de cultura del Ayuntamiento de Santa Eulària.

Celebración con seguridad

La misa empezó ayer a las 19 horas en la capilla de Sant Cristòfol, en Es Canar. Los asistentes disponían de mascarillas y de gel desinfectante en la entrada. A la hora de darse la paz, inclinaban la cabeza y antes de dar la hostia, el cura se desinfectó las manos.
Mientras se celebraba la misa, ya iban llegando los carros con caballos. Els ‘carreters' saludaron contentos a la afición.

«Normalmente en verano vienen más estranjeros, pero, la fiesta este año ha sido para nosotros, que ya era hora», dijo alegremente Toni Ferrer i Marí, párroco encargado de la misa de Sant Cristòfol, quien también indicó que «ha venido más gente de lo que pensaba. Estoy muy contento.»

«Han sido unas fiestas diferentes, así que hemos intentado que la gente se encontrase a gusto. Hemos intentado organizar las fiestas de manera que se pudiera compartir entre las familias y los visitantes, con la seguridad que estos tiempos nos pide», declaró Juan Carlos Rosselló, regidor delegado de Es Canar.

Los actos que se celebrarán en estas fiestas serán las 61 actuaciones de microconciertos en 17 diferentes locales de Es Canar, la Primera Feria Mundial de la Paella, una ruta cicloturista alredededor del pueblo, pasando por Cala Pada, s'Argamassa y Cala Nova, una ruta a pie y una prueba de puertas abiertas de vela organizadas por el Club Náutico de Santa Eulària.