Ayer martes, el gerente de Abaqua, Guillem Rosselló, y el secretario general, Juan Calvo, se reunieron en Ibiza con representantes del Consell y de la empresa responsable de la gestión del centro de tratamiento de residuos de Ca na Putxa. El encuentro se celebró con el objetivo de mejorar la gestión conjunta de los lodos de las depuradoras de Ibiza.
En un comunicado, la Conselleria informó que, en la actualidad, los lodos se transportan a la Península para su tratamiento y reutilización debido a la carencia de una planta de compostaje en la mayor de las Pitiusas. Esta gestión comporta un «elevado» gasto, tanto de tipo económico como energético, según destacaron desde el Govern. En este sentido, el año pasado se transportaron 10.549,97 toneladas, un 2,74% más que en 2018. Para ello, el Govern destinó 1.225.670 euros, un 4,48% más que en 2018.
Los responsables de Abaqua manifestaron ayer la satisfacción por la aprobación del plan director de prevención y gestión de residuos de Ibiza, que incluye la previsión de construir la nueva planta de compostaje.
Abaqua calcula que las nuevas instalaciones permitirán un ahorro mínimo de 125.000 euros anuales, el 10% del coste actual del transporte de lodos a la península. El tratamiento de los lodos en la nueva planta permitirá su reutilización para uso agrícola. En la reunión, los representantes de Abaqua explicaron que han iniciado un proyecto piloto de reducción de generación de lodos mediante la implantación de nuevas biotecnologías para mejorar el tratamiento biológico de las aguas fecales en las depuradoras que gestiona. Se prevé que este sistema pueda reducir un 10% la generación de lodos en las depuradoras de Baleares. Así, Abaqua cumpliría esta misma legislatura con los objetivos de la Estrategia Española de Economía Circular que establece para el 2030 la reducción de residuos en un 15% e incrementar la reutilización hasta el 10%.
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