La compañía ibicenca Clownidoscopio, compuesta por David Novell y Monma Mingot, está viviendo unos meses muy intensos con su espectáculo Refugi.
Desde noviembre del año pasado han mostrado su última obra por buena parte de España. Ha sido desde febrero cuando se ha intensificado todo y ahora mismo viven en un no parar. Tras actuar el miércoles 5 en el auditorio del Centre Cultural Can Ventosa de Ibiza, marcharon hasta el Teatre del Raval de la localidad alicantina de Gandía donde llenaron de público sus nueve representaciones, ocho de ellas pensadas para escolares.
En marzo, gracias a la programación del festival internacional de las artes escénicas para niños y jóvenes Teatralia 2020, han llevado a cabo tres funciones en el Centro Cultural Pilar Miró de Vallecas, una el domingo y otras dos más para escolares este lunes a las 10.30 y 12.00 horas.
Desde Madrid han puesto rumbo directamente hasta Cataluña, donde hoy tienen previsto representar la obra en el Teatre Principal de la localidad barcelonesa de Vilanova i la Geltrú. El jueves, casi sin tiempo, Clownidoscopio actuará en Premià de Mar, también en Barcelona. El sábado 14 regresarán hasta Madrid para estar en Colmenarejo, y dos días después volverán a Cataluña hasta final de mes para actuar en Arenys de Mar, Mataró y Vilassar de Dalt.
Un gran éxito
Estos días intensos de viajes, montajes y representaciones reflejan el éxito que ha tenido Refugi. Sus dos creadores, David Novell y Monma Mingot, han puesto en marcha una obra de teatro que desde que se estrenó en el Teatre Principal de Palma en noviembre de 2018 ha conseguido divertir y al mismo tiempo remover las conciencias de miles de espectadores.
Refugi es una obra de teatro gestual y sin palabras de 50 minutos de duración en la que los dos actores afincados en Ibiza desde hace años han contado con la colaboración de Gitta Malling, directora de la compañía danesa Limfjordsteatret y encargada de la dirección y la dramaturgia, Victoria Kersul, Andrea Cruz, Josepha Meves, Katia Moretti, Julian Ain Coen, Ishka Michocka y Kiko Barrenengoa, autor de la música original.
Una historia que hace pensar
Según explicaron ambos a Periódico de Ibiza y Formentera, se trata de una obra que está pensada para que un amplio espectro de público, «desde los cinco a los 99 años», «descubra los niños que llevamos dentro a través de una historia que hace reflexionar sobre nuestra realidad cotidiana». Algo que hace a través de dos personajes completamente opuestos, «un hombre que quiere cuidar y mantener su lugar en el mundo porque necesita un refugio donde sentirse seguro y a salvo, y otro que lo ha perdido y que busca desesperadamente un lugar donde empezar de nuevo», aseguró David Novell.
Por ello, en la obra se tratan temas tan actuales como la crisis de los refugiados, algo que hace precisamente a través de los dos protagonistas. «Uno es el que recibe y tiene que pensar lo necesario e importante que es acoger a los que llegan para hacerles el camino más fácil, dándose cuenta de lo que necesitan y ver cómo se les puede ayudar», y el otro, el que llega, «debe tener en cuenta lo necesario que es respetar su nuevo lugar de vida y escuchar cómo se hacen las cosas por respeto a quien está cuidando de este espacio».
En este sentido, Novell y Mingot aseguran que su intención no ha sido la de juzgar ninguna de las dos vertientes, sino tratar este choque de realidades «utilizando la poesía y la ternura del clown teatral». Además, se han centrado en el público familiar para «generar una profunda reflexión que nos haga preguntarnos, entre otras cosas, «¿cómo pueden estas dos realidades convivir en el mismo espacio?»
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