Un encuentro que llega después de que el Ayuntamiento de Eivissa decidiera a principio de esta semana que los vehículos de fuera de Vila no podrán prestar servicios del GPS en la ciudad. «Vila ha dado un puñetazo sobre la mesa y el martes nos explicará porqué ha tomado esa decisión», señaló Joan Torres, concejal de Movilidad y Transportes de Sant Antoni, quien indicó que a su parecer «esta decisión empeora el servicio».
Torres recordó que en la pasada legislatura, los cinco ayuntamientos de la isla llegaron a un consenso para poner en marcha un GPS único. «Debía pasar por los plenos municipales, pero solo pasó por el de Sant Joan». Con la nueva legislatura y los cambios en las concejalías, «algunos quieren hacer modificaciones», aseguró. No obstante, el concejal de Sant Antoni, hizo hincapié en que «hay que trabajar para llegar a un consenso». Desde este municipio, se aprovechará el encuentro para reivindicar, una vez más, el que se permitan los taxis de siete plazas en la isla.
También Sant Joan quiere llegar a un acuerdo. «Siempre hemos apostado por un GPS único. Entendemos que es una buena solución», señaló el alcalde del municipio, Antoni Marí Carraca. Además, este municipio pedirá que se homologue un uniforme para los taxistas. «Beneficia en una doble vertiente, por un lado en cuanto a la imagen que ofrecemos de cara al turista y por otra para distinguirse de los taxis piratas», aseguró Carraca.
El municipio de Santa Eulària insistió por su parte en que están «dispuestos a apoyar las medidas que sean necesarias». Aún así indicaron que esperarán «a ver qué propuestas concretas se formulan y también ver qué opinión le merecen al sector del taxi».
El Ayuntamiento de Sant Josep prefirió no pronunciarse respecto al tema hasta que no se celebre la reunión.
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