La bahía de Sant Antoni.

El Club Nàutic Sant Antoni (CNSA) ha aprobado una nueva estrategia medioambiental basada en un total de ocho líneas de actuación, que tiene como objetivo implantar soluciones a corto y medio plazo para optimizar al máximo sus ratios de sostenibilidad en la gestión diaria y las actividades que organiza. Con esta política de trabajo, el CNSA, que es una entidad sin ánimo de lucro, alcanza compromisos como el crecimiento cero en amarres, con independencia de los cambios de usos que se produzcan en la bahía, el desarrollo de campañas de concienciación entre sus socios y usuarios para proteger la posidonia o vaciar sentinas en puerto, y la puesta en marcha de un sistema fotovoltaico que reduzca el consumo eléctrico de la red, entre otros.

El primer punto de esta nueva política constituye un compromiso de crecimiento cero en amarres, ya que desde Es Nàutic se considera que los mil puntos de atraque de náutica deportiva que ya existen en la bahía –sumando los de Ports IB a los que gestiona la propia entidad–, son suficientes para atender la demanda actual. Únicamente en el mes de agosto se registra una demanda mayor de la que se puede atender y el CNSA, con independencia de los cambios de usos que puedan producirse en el puerto en el futuro, anuncia que no incrementará su capacidad de amarre.

En segundo término, Es Nàutic desarrollará el proyecto Zero Plastic de concienciación sobre la contaminación de plásticos en el mar, que consta de tres líneas de actuación: eliminar el uso de plásticos de un solo uso en las actividades que realiza el CNSA, concienciar a empleados, deportistas, socios y usuarios del club para que no utilicen envases de plástico para el agua e instalar varias fuentes de agua potable en las instalaciones del club, así como envases ecológicos de 50 cl y 5 litros para que las embarcaciones reposten agua potable en estos recipientes, evitando que la traigan del exterior en envases de plástico.

A continuación, se potenciará la educación medioambiental en el marco del 25 aniversario de la ‘Setmana del Mar' y de las jornadas ‘Un dia a la mar'. También se tratará de ampliar esta formación a un número mayor de colegios y se trabajará en la posibilidad de encontrar y financiar una goleta con capacidad para 30 niños más tripulación, para que puedan realizarse actividades durante todo el año escolar.

Como cuarto punto, se desarrollará una campaña de concienciación para que los socios y clientes del club hagan un mayor uso de los sistemas de extracción de aguas sucias y de sentina que tienen a su disposición en el puerto, para evitar así que estas se viertan al mar.

Se desarrollará, asimismo, otra campaña de concienciación entre socios y clientes para evitar el fondeo sobre posidonia. Para ello, se hará entrega de un folleto explicativo a todas las embarcaciones del puerto y a las que visiten sus instalaciones con el objetivo de subrayar la importancia medioambiental de esta planta marina y dar a conocer la legislación que la protege.

En sexto término, Es Nàutic se compromete a colaborar en 2020 con la segunda edición del Foro Marino de Ibiza y Formentera, con el objetivo de difundir sus políticas medioambientales y contribuir en la búsqueda de soluciones para mejorar las condiciones del medio marino.

Desde el Área Deportiva del Club Nàutic Sant Antoni también se van a desarrollar distintas iniciativas, con la colaboración de los regatistas y palistas del club, de limpieza de playas y recogida de los residuos que flotan en el mar.

El octavo y último apartado de esta nueva estrategia de sostenibilidad se centra en las inversiones medioambientales que Es Nàutic estudia afrontar. Entre ellas, figura la puesta en marcha de una instalación fotovoltaica con paneles solares para reducir el consumo eléctrico de la red y también se baraja la posibilidad de instalar paneles solares especiales sobre los propios pantalanes de madera. Se prevé, asimismo, la instalación de puntos de suministro para la recarga de coches eléctricos en el pantalán central, así como la implantación de varios dispositivos ‘Seabin', que son unos cubos flotantes que se instalan en el mar y recogen plásticos, aceites y basuras.