El Cepca alerta del aumento de casos de ludopatía en jóvenes de Ibiza

Alvite indica que muchos jóvenes empiezan a apostar «en cuanto tiene tarjeta de crédito, algunas antes de los 18 pero en general a los 18». Su acercamiento al mundo de las apuestas y las ruletas se hace «como una forma de diversión, como si fuera el Candy Crush, con la diferencia de que jugamos con dinero real». Advierte, además, de la peligrosidad de que se pueda apostar directamente a través de aplicaciones móviles, dado que es algo que se «lleva en el bolsillo y está con nosotros a todas horas». «No son las tragaperras, a las que yo, si decido que no quiero jugar, puedo dejar de pasar por delante del bar en el que juego y así acoto las situaciones de peligro. ¿Cómo le pongo coto a algo que va conmigo todo el tiempo?».

Además hace una advertencia especial a aquellos que apuestan en eventos deportivos que «creen que apuestan basándose en sus conocimientos sobre el deporte». Indica que además esto genera cierta confianza de control de la situación, al considerar que se apuesta desde el conocimiento. Las personas que alcanzan inicios de ludopatía con esta clase de apuestas «normalmente no reconocen que apuestan de forma compulsiva, dado que hacen seguimiento de los equipos, los resultados, las estadísticas…». Sin embargo, luego se llega a apostar «a resultados de partidos de la liga femenina china o a un partido de badminton en Tailandia». Critica también que grandes referentes deportivos «deberían dejar de publicitar esto. Tú si les ofreces publicitar una marca de tabaco o de alcohol te dirán que ese tema no va con ellos. Pero publicitan páginas de apuestas como si esto fuera algo normal. Yo si estuviese en el lugar de muchos me lo pensaría».