Los trabajadores realizaron ayer varias marchas de protesta tanto en Vila como en Sant Antoni. | Daniel Espinosa

La fecha ya está decidida: el 1 de julio. Los trabajadores de la UTE Giref, concesionaria del vertedero votarán en asamblea el próximo 3 de mayo si inician una huelga indefinida en Ca na Putxa.

El resto de empleados de la UTE Portmany y de Valoriza, responsables de la recogida de residuos y limpieza viaria en los municipios de Sant Antoni e Ibiza tienen previsto iniciar la huelga un poco más adelante «a mediados de julio», aseguró ayer Felipe Zarco, secretario general de Comisiones Obreras (CCOO) de Ibiza y Formentera.

«Los trabajadores del vertedero decidieron en asamblea que preferían no hacer la huelga con el resto de compañeros porque cuantos más camiones entren mejor. Si la hacen todos juntos solo entraría la basura de Santa Eulària, Sant Josep y Sant Joan», explicó.

Tanto los trabajadores del vertedero como los de la limpieza de Vila y Sant Antoni llevan más de un mes con protestas y no ha habido avances en las negociaciones con las respectivas empresas concesionarias.

Piden un 3% de subida salarial anual, además de «que haya un 75% de plantilla fija y fija discontinua», detalló Zarco.

«La precaridad de contratación es total. Por ejemplo, la empresa Valoriza está contratando a peones para hacer de conductores sin pagarles la diferencia de categoría. A parte que a los que se jubilan no les suplen. Estamos viendo como se reducen las plantillas, los trabajadores tienen muchísima más carga de trabajo y encima cobran menos», señaló.
Zarco explicó también que con la llegada de la temporada de verano, más turismo y más basura sí que se refuerza algo la plantilla «pero no se llega a los niveles de antes de la crisis. De hecho hay trabajadores que a veces casi tienen que doblar la jornada incumpliendo el estatuto de los trabjodores, que marca que puedes hacer 80 horas voluntarias anuales», señaló.

«Hay trabajadores que no quieren hacer horas, aunque se paguen. Quieren acabar a su hora y sin embargo están obligados a terminar los recorridos haciendo horas sobre todo en verano», aseguró.

Así mismo, comentó que creen que este tipo de trabajos «se tendrían que internalizar en los ayuntamientos y en el Consell».

Protestas
Debido a esta situación, ayer iniciaron las marchas protesta que prevén repetir cada semana hasta el próximo 30 de mayo.

La primera fue en Sant Antoni, donde los trabajadores recorrieron entre las 10 y las 11 de la mañana, desde el Paseig de Ses Fonts hasta la entrada del ayuntamiento.

Después se plantaron en la Concejalía de Medio Ambiente de Vila y desde allí, marcharon a la puerta del Consell d'Eivissa para permanecer concentrados hasta las 13:30 horas. Un recorrido que transcurrió entre pitadas, gritos y acopañados de pancartas en las que se podía leer «No más contratos basura. Plantilla fija ya»o «En las contratas de limpieza viaria y gestión de residuos lo más limpio es la basura».

Negociaciones
Según explicó el secretario general de CCOO, sindicatos y empresa concesionaria del servicio de limpieza en Ibiza, Valoriza, se reunieron este miércoles para continuar con las negociaciones del nuevo convenio colectivo sin llegar a ningún acuerdo «aún habiendo rebajadomuchísimo sus reivindicaciones».

En la plataforma inicial se pedía un incremento del 28% para los próximos cuatro años y «ahora lo que se puso encima de la mesa es un aumento de sueldos del 3% anual, es decir un 12% para cuatro años». Zarco afirmó que Valoriza solo propuso la prórroga del actual convenio hasta el próximo 1 de enero, «pero sin subida alguna», mientras que el comité de empresa propone un incremento del 5% para este año «porque los trabajadores llevan perdiendo poder adquisitivo desde 2011».

Administraciones
Durante las protestas de ayer, los trabajadores fueron escuchados por el alcalde de Vila, Rafa Ruiz y la concejal de Medi Ambient, Montse García, que según explicó Zarco están dispuestos a «poner de su parte para que la empress que ayer se levantó de la mesa sin propuesta ninguna se siente de nuevo», dijo.

También hablaron con Marta Díaz, vicepresidenta segunda del Consell d'Eivissa que aseguró que «no va a dejar de lado a los trabajadores si tienen problemas y que se hablará con la empresa para que por lo menos negocie».

Por su parte, la portavoz del grupo Podemos-Guanyem en la institución insular, Viviana de Sans, dijo que «el tema de base es sacar las licitaciones con un convenio donde quede especificada la subida salarial y las condiciones laborales». No obstante, señaló «de cara a la próxima legislatura hay que buscar otras fórmulas mancomunadas de los cinco ayuntamientos para este tipo de contratas para que el dinero que pagan las administraciones se quede en la isla», indicó.

Según explicó Felipe Zarco, de CCOO, la única administración que ayer no les dijo nada fue el ayuntamiento de Sant Antoni. «La semana pasada nos reunimos con Pablo Valdés, concejal de Limpieza y Medi Ambient, y nos dijo que hablaría con la empresa, pero 8 días después seguimos sin saber nada», indicó.