La veintena de trabajadores de la administración de Justicia mostraron una serie de carteles en los que se indicaba su rechazo a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), una protesta que todo apunta desembocará en un paro general el próximo día 16, según apuntó el secretario general de CSIF en las Pitiusas y vicepresidente autonómico, Juan Nieto.
Los sindicatos CSIF, STAJ, CC OO y UGT han anunciado que van a llevar a cabo un incremento de las movilizaciones en el sector Justicia y han convocado una huelga para «frenar la mayor agresión a nuestros derechos laborales».
El responsable de CSIF denunció la intención de unificar en uno solo los centros de destino de cada municipio, así como la «movilidad forzosa» y el cese del personal interino de refuerzo a los seis meses.
«Pretenden acabar con los refuerzos del personal funcionario y en aquellos órganos judiciales en los que se nombren refuerzos, la plantilla no se incrementará», advirtió Nieto, quien subrayó que los trabajadores del sector Justicia «no van a tolerar más atropellos» y recordó que en 2008 ya se hizo una huelga general.
Ante esta situación, el responsable balear del CSIF avanzó que desde Ibiza se secundará la huelga general prevista en todo el territorio nacional para el día 16 de noviembre, a modo de «toque de atención» para el Ministerio de Justicia.
Protesta sector prisiones
En paralelo a la protesta de los funcionarios de Justicia, los trabajadores de prisiones también realizaron una nueva jornada de protestas. El calendario de paros en todo el territorio nacional quedó en suspenso pero los trabajadores del Centro Penitenciario de Ibiza retomaron ayer sus protestas aunque en esta ocasión se trasladaron hasta el centro de Ibiza, a la sede de los juzgados.
El representante sindical de prisiones de UGT en Ibiza, José Luis Cudillo, indicó que la movilización se trasladó hasta las puertas de los juzgados «para que se nos oiga». La treintena de trabajadores movilizados se hizo notar con una pitada que se prolongó más de diez minutos.
Cudillo reivindicó una equiparación salarial con otros cuerpos de seguridad, como Policía Nacional o Guardia Civil, así como mayor seguridad laboral. «Policías y guardias civiles se merecen esa compensación porque se lo ganan día a día pero nosotros también», indicó el representante de UGT.
Cudillo denunció asimismo los servicios mínimos impuestos durante las tres primeras jornadas de paros convocadas en octubre por los sindicatos ACAIP, CCOO, CSIF, UGT y CIG. Recordó que en Ibiza hay una plantilla de más de cien personas pero «envejecida y con unas carencias de medios notables», lamentó.
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