Durante el debate las críticas entre equipo de gobierno y oposición fueron constantes. | Daniel Espinosa

La portavoz del PP, Virginia Marí, habló ayer en el pleno extraordinario de lo que, a juicio de su partido, son los cuatro problemas que sufre el municipio: limpieza, movilidad, vivienda pública y diálogo y democracia.

En cuanto al primero, Marí acusó a Ruiz de culpar a su partido y a los vecinos de Vila de la suciedad de las calles, quienes pagan 140 euros al año por la limpieza, y no titubeó al decir que «Eivissa es la ciudad más sucia de España». El alcalde respondió a las acusaciones reprochando el «lamentable» trabajo que hacía la anterior contrata.

Por otra parte, tanto el PP como EPIC volvieron a criticar las actuaciones hechas durante esta legislatura en materia de Movilidad. «La movilidad en el municipio es errática y caótica», criticó Antoni Villalonga, concejal de EPIC quien como siempre se refirió a las «3.000 plazas de aparcamiento perdidas» que, según dijo, «no se recuperan con las 300 proyectadas en el Mercat Nou». Villalonga insistió también en los problemas circulatorios que se forman continuamente en la entrada de la avenida Santa Eulária y tildó de «morbilidad» la movilidad dentro de la ciudad. «El estado de la ciudad es mediocre y está acorde con el alcalde y el equipo de gobierno», espetó.

La portavoz popular fue más contundente y acusó al alcalde de «odiar» a los coches «aunque sean imprescindibles por trabajo o para gente con movilidad reducida». Críticas también por crear una «emergencia social» en cuanto al tráfico durante las dos últimas temporadas turísticas que, según apuntó, no se soluciona con los aparcamientos disuasorios. «Mintió al decir que había creado 1.000 plazas», añadió Marí.

En este sentido, los dos grupos de la oposición coincidieron en que los cambios en la política de Movilidad de Vila han ocasionado el cierre de «muchos» comercios emblemáticos. «No ha sido el gobierno de la regeneración, sino de la degeneración», subrayó Marí.

Cetis

Ruiz no se olvidó de hablar de la estación de autobuses del Cetis en su discurso haciendo referencia a la necesidad de disminuir el uso del vehículo privado. Según dijo, el equipo de gobierno tiene la necesidad de introducir cambios de cara a una movilidad «más sostenible como tienen las ciudades europeas».

«El Cetis tiene que jugar un papel importante para reforzar todo el sistema de transporte público urbano e interurbano». Sin embargo, todavía no hay fecha de apertura.

En este sentido, Villalonga consideró que «mejor dar un servicio deficiente a estar cerrado» y apuntó que dar una alternativa al vehículo privado incrementando en 40 céntimos el coste del billete «no hará gracia al ciudadano».

Autoritat Portuària

Por otra parte, el alcalde de Vila calificó de «suerte» el hecho de coincidir con el actual presidente de la Autoritat Portuària de Balears (APB) «por entender que el puerto no puede ser un ente aislado de la ciudad». Así, destacó el acuerdo al que se llegó para que el edificio de la plaza de Es Martell permitiese que la zona fuera un espacio transitable para las personas.

Para Epic esto no es así. Villalonga catalogó la zona de «núcleo privado» de la APB y le preguntó a Ruiz si está orgullosos de «mentir» a la ciudadanía por prometerles un espacio para ellos. «¿Qué se está haciendo para recuperar Es Martell?».

Ruiz también hizo referencia a la redacción del Plan Especial del puerto por parte de la APB. «Un documento imprescindible que verá la luz pronto y donde se reflejará la transformación que ya está planificada», explicó. Cabe recordar que el proyecto contempla la ampliación del paseo para viandantes, la nueva estación de servicio Eivissa-Formentera, la nueva estación de Botafoch, el Club Náutico y el aparcamiento soterrado (que está a falta de la aprobación de la DEUP para iniciar su tramitación).

Asimismo, el Ayuntamiento volvió a presumir ayer de tener deuda cero y de acabar la legislatura con más de 20 millones de euros. Sin embargo, lamentaron no poder destinar este dinero a incrementos de plantilla.

Más críticas

Mientras el PP tildó al pacto PSOE-Guanyem de «coalición de perdedores», Epic les acusó de «favorecer» a las empresas de sus familiares y de aprobar un reglamento para limitar el número de mociones en pleno. Por su parte, Ruiz criticó al Partido Popular por no aportar propuestas en el día de ayer y recordó que «hay temas que duran años en solucionarse».