En este sentido, explicó que el colectivo del taxi no ha negociado las condiciones del reglamento ni con el Ayuntamiento de Vila ni con la APB. «Es una decisión unilateral. El convenio lo han escrito ellos y han dicho que es así».
Así, niegan que el reglamento haya sido consensuado por todas las partes, aunque reconocen que lo sucedido el lunes en la fachada marítima fue un «descontrol». «Los taxis tenían ganas de estar dentro y no entendieron bien las condiciones. Se les han explicado y parece que ya está bien», matizó Cardell.
De hecho, la segunda jornada de acceso controlado al puerto transcurrió bajo lo pactado. «Ellos nos han advertido y sabemos que hay que hacerlo bien», añadió el presidente.
Aún así, remarcó que falta voluntad por parte de las instituciones para conocer el funcionamiento y la labor que desempeña este servicio público. «Evidentemente aceptas el convenio porque antes no entrabas y ahora sí, pero no abandonamos la postura de que, en un futuro, se haga una parada pequeña para volver a estar dentro del puerto», puntualizó Cardell.
Para argumentar la necesidad que los taxistas ven en la creación de una parada en la zona portuaria, dijo que la ya existente en Bartomeu de Roselló no responde a la demanda «ni de taxistas, ni de clientes». A su juicio, esta situación hace que se creen dos colas y el hecho de una parada más permitiría «descongestionar» el centro de la ciudad.
El presidente de la Federación Insular de Taxis también quiso recordar que el sistema de control de entrada a la fachada marítima está en pruebas y «no hay que confiarse». Por ello, expresó su deseo de que todo funcione bajo lo establecido para poder «dar servicio» de continuo a los usuarios y no solo en época estival.
Servicio de ‘boogies'
Son muchos los usuarios, además de taxistas, que critican el servicio que ofrecen los boogies en la zona. Según dicen, aunque el servicio sea gratuito muchos transportan a los clientes previo pago de una propina. «No hay tarifas ni nada, pero sabemos que se hace porque lo hemos visto», relataron algunos comerciantes.
Sin duda, una situación que causa crispación en el sector ya que «a ellos nadie les controla y nosotros siempre estamos en el punto de mira», argumentaron algunos taxistas.
6 comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
Todos se lavan las manos: Ayuntamiento y taxistas. La culpa siempre es de los otros. El ayuntamiento es un absoluto incompetente en todo lo que hace y toca. En lo que al Puerto y casco antiguo se refiere no demuestra nungún tipo de sensibilidad ni por el comercio ni por los residentes. Antes de peatonalizar una zona hay que dotarla de acceso garantizado con servicio de transporte público y plazas de aparcamiento. Pero en Ibiza eso brilla por su ausencia.
El servicio de boogies para quién es? Quién los paga? Actualmente es un servicio de taxi encubierto, con pago por propinas. La
Y quién da las licencias de los Taxis, el Espíritu Santo, lo que el Ayuntamiento negocia respecto a los Taxis tendría que ir a misa y no que cada uno haga lo que le de la gana.
La arrogancia de Alejandro Cordell no tiene limite. Nadie pacto, nadie me aviso, he han impuesto. Lo típico de los taxistas que se creen que pueden ir por donde les salga de las narices y a sus anchas. Otra parada mas en el puerto??? Para que esté vacía como la de Bartolomé Rosello, en las horas que se necesitan servicio. Para hacer perder mas vuelos a la gente que confía en el desastroso servicio de taxis. Vamos Alejandro, baja la cabeza que te echaran del puerto tambien. Los boogies dan un excelente servicio, Limpio, y seguro dentro del puerto. A llorar a la Iglesia Alejandro.
Lo que da miedo es el atasco que hay para acceder a Bartolomé Rosello que parece que eso no lo ve nadie
Los taxistas no pueden quejarse de nada. La situación de las colas en la parada de Bartolomé Rosello es de miedo. Con esa visión entiendes que haya taxis piratas.