La ampliación del colegio de infantil y primaria de Sant Carles de una a dos líneas será escalonada y costará 1,6 millones de euros. El conseller d'Educació, Martí March, presentó ayer la primera fase del proyecto, que afecta a la zona de infantil, que no cuenta con el beneplácito de la comunidad educativa. El conseller presentó ayer el proyecto básico sobre el que se realizará el definitivo y se espera que en un par de meses puedan licitarse las obras.

El presupuesto total del proyecto asciende a 1,6 millones de euros, aulas de infantil, primaria y un gimnasio, y las obras serán de manera escalonada «sin que moleste el normal funcionamiento de la escuela» . La parte de infantil está presupuestada en 400.000 euros. «A medida que se hagan las obras el centro quedará ampliado en una doble línea», explicó. El conseller calcula que las obras de la primera fase pueden empezar antes de acabar el año: «Creo que las aulas de infantil se pueden utilizar para el curso 2019-20 y el resto dependerá del proceso de construcción». El tiempo de construcción será de unos cuatro meses.

Ante el rechazo del proyecto de la comunidad educativa, el conseller aseguró que «respeta la posición de la comunidad educativa; hemos tenido reuniones y escuchamos sus reivindicaciones, pero lo más importante es la escolarización; tenemos que escolarizar en función de las demandas y necesidades de cada población; Ibiza es una isla con una fuerte demanda de escolarización que no ha parado desde que estamos en la Conselleria y nuestro objetivo es dar repuesta a las necesidades». El conseller dijo que «comprendía que todos tienen su proyecto educativo, pero también pensamos que puede ser reforzado con nuevas instalaciones para su proyecto pedagógico y tendrá unos servicios que ahora no tienen; si tenemos el consenso mejor pero nuestro objetivo es escolarizar». Añadió, en este sentido, que «llega un momento en el que la administración toma decisiones; no podemos plantear cualquier decisión en función de lo que plantea un centro, sino que un colegio es de todos: el derecho de la ciudadanía está por encima de un equipo directivo, los respetamos pero hemos de escolarizar y eso es un elemento clave».

La Amypa del colegio de Sant Carles ha mostrado un rechazo incial al proyecto de ampliación del colegio. De hecho, han recogido alrededor de unas 300 firmas en contra de este ampliación. Tras la reunión de ayer, los padres que asistieron no han querido opinar hasta que no tengan un encuentro con el resto para abordar reunión para abordar este tema.

Una vez acabado el proyecto de infantil, se comenzará la parte de primaria. «Será progresiva y se puede hacer una escuela ordinaria sin que afecte la construcción de las unidades de infantil», explicó el conseller.

El proyecto de la primera fase de infantil contempla la construcción de cuatro aulas, una de ellas psicomotricidad, y con sus baños correspondientes. Las aulas que se construirán para un máximo de 25 alumnos por cada una se ubicarán donde se encuentran ahora los barracones. Luis Galmés, el arquitecto del Ibisec, encargado del proyecto, explicó que «se ha intentado respetar el pinar trasero y dar el máximo de servicios». La segunda fase del proyecto que contempla perimaria y el gimnasio se hará una vez que el Ayuntamiento ceda el solar a la Conselleria d´Educació.

Aulas modulares

March recordó que está previsto «para la próxima legislatura» construir un nuevo colegio en Santa Eulària, «pero no tenemos la recepción de un solar; la presión es importante y si realmente va bien habra la ampliación de Sant Carles y nuevo colegio en Santa Eulària», explicó. Ante si será necesario poner más aulas modulares para atender la demanda de cara al curso próximo, el conseller dijo que «el objetivo es ir construyendo centros y a medida que se haga se quitarán las modulares; nuestra política es escolarizar». Añadió que hasta que no se abra el proceso de escolarización no se verán «las necesidades reales».

EL APUNTE

El colegio de Sant Mateu pide más espacio a Educació

El conseller d'Educació aprovechó ayer su visita a Ibiza para visitar la escuela unitaria de Sant Mateu donde recogió las reivindicaciones de los docentes. «Nos interesa conocer la problemática de estos centros. En Sant Mateu tienen una demanda puramente de infraestructuras porque demandan la casa del maestro para dar respuesta a sus necesidades pedagógicas. Es un centro pequeño que funciona bien y está en un contexto fantástico».