El cuerpo fue encontrado a primera hora de la tarde del jueves en avanzado estado de descomposición debido a las altas temperaturas registradas en los últimos días y al efecto causado por la chapa.
El fuerte hedor que desprendía el cuerpo fue lo que llamó la atención de algunos vecinos de la zona. El olor provenía del interior de una pequeña caseta de obra ubicada en la esquina de un solar localizado en la avenida Sant Jordi.
El hombre llevaría muerto más de cuatro días, según las fuentes consultadas. Aunque el cadáver no ha sido identificado todo apunta a que la víctima sería un hombre de unos 60 años que vivía desde hace un tiempo en el interior del solar.
Investigación
La Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía se hizo cargo de la investigación de la muerte. A pesar del avanzado estado de descomposición, de la inspección ocular se desprende que el cuerpo no presentaba signos de violencia.
El cuerpo fue descubierto por una patrulla de la Policía Local de Vila que derivó el caso a la Policía Nacional.
Agentes de la Policía Científica se trasladaron al lugar e inspeccionaron la caseta de chapa, punto al que también se trasladó una comisión judicial con personal del Instituto de Medicina Legal.
Ayer por la mañana, la sorpresa era la tónica entre los vecinos y los trabajadores de los establecimientos cercanos.
«Es una auténtica lástima morir de esa manera», señaló una empleada de una cafetería situada a pocos metros del lugar donde hallaron el cadáver que, según apuntaron, corresponde al hombre que ocupaba la instalación.
Se da la circunstancia de que hace unos meses la Policía Nacional ya tuvo que atender la muerte de otro indigente en una chabola localizada en un punto próximo de la misma avenida Sant Jordi.
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