Un grupo de embarazadas participaron ayer en un taller de danza del vientre en el Centro de Salud de Vila para fortalecer los músculos de la pelvis y favorecer un parto natural. | Daniel Espinosa

Los beneficios de la danza del vientre en el momento del parto adquieren toda la lógica cuando la profesora, María Rata, lo explica al grupo de embarazadas que participaron ayer en esta clase de preparación al parto en el Centro de Salud de Vila. Cuando un anillo nos aprieta y no logramos quitárnoslo, lo normal es mover a la vez el dedo (en este caso, la madre) y el anillo (el bebé) para que salga con mayor facilidad.

«Buscad vuestras caderas que las tenéis», les indica. Una de las embarazadas está fuera de cuentas pero, a pesar de ello, sube y baja la pelvis como le enseña la profesora. El objetivo es fortalecer los músculos del suelo pélvico a través de los movimientos de la danza del vientre y facilitar así a la mujer que tenga un parto más natural. Eso en cuanto a los beneficios físicos. Porque, según esta profesora especialista en el baile oriental, el embarazo no es una enfermedad sino «un momento de alegría» que el movimiento y el baile puede acentuar aún más. Además, es un ejercicio que cualquier embarazada sin problemas puede hacer hasta el final. «En mi caso bailé hasta cuatro días antes de dar a la luz a mi hijo», asegura.

Chus está embarazada de 31 semanas y ayer asistió por primera a esta clase de preparación al parto. Lo hace porque quiere que su vagina y su suelo pélvico estén preparados ante las contracciones del parto y para aprender posturas que le ayuden a calmar los dolores.

María, en cambio, llega a la clase con Aysel, su risueña bebé que le acompañará en su primer clase de danza oriental tras el parto. Durante el embarazo practicó esta modalidad de baile y le encantó la experiencia porque le dio agilidad y le calmó los dolores de espalda. «En el momento del parto, los movimientos de la danza del vientre te ayudan. Cualquier ejercicio que hayas hecho para mover las caderas, resulta perfecto», señala.

María Feixas, matrona del Centro de Salud, comparte los beneficios de la danza del vientre para lograr «un parto en movimiento», en el que la mujer se pueda sentir activa en el momento de alumbrar a su bebé y más cómoda a través de las posturas que se imparten también en este taller.